Hedoné

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Hedoné (griego antiguo: ἡδονή, hēdonē) es la palabra griega que significa "placer". Era un concepto importante en la filosofía griega antigua, especialmente en la escuela epicúrea. También es la raíz de la palabra inglesa "hedonismo".

En la mitología griega, Hedone se personifica como una diosa del placer, el disfrute y el deleite, como la hija nacida de la unión de Eros (personificación del amor) y Psique (personificación del alma). Se la asoció más específicamente con el placer sensual. Sus opuestos eran las Algea, personificaciones del dolor. Su equivalente en la mitología romana es Voluptas. No hay evidencia de que alguna vez haya sido objeto de culto.

Filosofía aristotélica

Aristóteles lo identificó como uno de los dos elementos o componentes de pathe, siendo el otro lype o dolor. El filósofo describió pathé con estas palabras: "Sean las emociones todas aquellas cosas a causa de las cuales las personas cambian de opinión y difieren en cuanto a sus juicios, ya las que acompañan el dolor y el placer".

Hēdonē, en la ética aristotélica, es parte del relato de la virtud del filósofo y se dice que el placer (junto con el dolor) revela el carácter de una persona. Es bueno si es consecuencia de una vida virtuosa en contraposición a la posición de algunos filósofos como Aristipo, que sostiene que es enteramente bueno. Para que el concepto sea bueno o verdadero, debe ajustarse a la naturaleza, la razón o la virtud y eso, aunque hēdonē puede armonizar con estas tres, Aristóteles le dio menos valor. Un ejemplo es el concepto de placer propio u oikeia hedone, que ha sido discutido en Poética y considerado un proceso de restauración.La interpretación de Martin Heidegger de la filosofía aristotélica explica que el placer es un movimiento del alma y que de él surge la tranquilidad.

En el epicureismo

En la filosofía de Epicuro, hēdonē se describe como un placer que puede derivarse o no de acciones virtuosas, mientras que otra forma de placer, terpsis, es siempre virtuosa. Otra lectura epicúrea, que distinguía hēdonē de terpsis, se refería a ella como una sensación de placer que es episódica y que puede o no ser beneficiosa. Según la Enciclopedia de Filosofía de Stanford, Epicuro usa hēdonē en referencia solo a los placeres físicos.

Estoicismo

Los estoicos tenían una visión negativa de hēdonē, argumentando que no está de acuerdo con la naturaleza y la razón. Esto puede entenderse dentro de la posición de la filosofía de que las emociones son por definición excesivas o son impulsos excesivos que exceden la medida de la razón natural y -como en otras formas de exceso- conducen a otros males de irracionalidad.