Gildardo Magaña

Ajustar Compartir Imprimir Citar

Gildardo Magaña Cerda (7 de marzo de 1891 - 13 de diciembre de 1939) fue un general, político y revolucionario mexicano.

Nacido el 7 de marzo de 1891 en Zamora, Michoacán en el seno de una familia liberal de comerciantes, Magaña fue enviado a estudiar economía a los Estados Unidos. De regreso a México se involucró en el movimiento antirreeleccionista y tuvo que huir al campo insurreccional zapatista de Morelos en 1911. Inmediatamente fue utilizado como emisario de varios revolucionarios en diferentes partes de México, entre otros de Pancho Villa a quien se dice que enseñó a leer. En 1916 fue nombrado jefe de gabinete de Emiliano Zapata, porque fue el único que logró que los subcomandantes rebeldes del movimiento cooperaran en lugar de pelearse, utilizando para la tarea su encanto personal y su destacada habilidad diplomática.

Cuando Zapata fue asesinado en 1919, Magaña fue elegido su sucesor con 18 votos contra 11 de Jesús Capistrán. Como comandante en jefe del ejército zapatista, se ocupó por excelencia de lograr una paz duradera. Para ello cultivó varios posibles aliados, en vano hasta que Álvaro Obregón se sublevó en 1920. Magaña inmediatamente declaró su apoyo y el de su movimiento y proporcionó a Obregón el ejército con el que conquistó México DF A cambio, el movimiento consiguió la Secretaría de Agricultura y sus ansiada reforma agraria hecha ley.

Bajo las presidencias de Obregón y sus sucesores, Magaña ocupó varios altos mandos militares, pero también encontró tiempo para fundar la Confederación Nacional Agraria, el sindicato de campesinos cardenistas. En 1936 fue elegido gobernador de su estado natal de Michoacán, cargo que ocupó hasta su muerte (por un infarto) en 1939. Poco antes de su muerte fue propuesto como candidato para el sucesor de Lázaro Cárdenas en la presidencia, pero declinó.

Ejército Nacional

En noviembre de 1919, debido al conflicto internacional con Estados Unidos provocado por el secuestro del cónsul Jenkins, Magaña y otros caciques sureños aceptaron la amnistía del gobierno de Venustiano Carranza, pensando en ponerse en defensa de la nación que se veía amenazada por un norteamericano. invasión. En enero de 1920 se levantó de nuevo en armas, probablemente por sugerencia de Álvaro Obregón y poco después se adhirió al Plan de Agua Prieta. Tras su victoria, el Ejército Libertador del Sur se fusionó con el Ejército Mexicano a través de dos divisiones. Magaña obtuvo el grado de Divisionario y se convirtió en comandante de la Segunda División del Sur. Genovevo de la O se convirtió en el primero. También intervino como mediador para conseguir la rendición de Francisco Villa, que se logró el 28 de junio de 1920.

Literatura