Alma

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En muchas tradiciones religiosas y filosóficas existe la creencia de que un alma es " el aspecto inmaterial o esencia de un ser humano".

Etimología

El sustantivo inglés moderno soul se deriva del inglés antiguo sāwol, sāwel. Las primeras atestaciones reportadas en el Oxford English Dictionary son del siglo VIII. En la traducción de King Alfred de De Consolatione Philosophiae, se usa para referirse al aspecto inmaterial, espiritual o pensante de una persona, en contraste con el cuerpo físico de la persona; en el Salterio de Vespasiano 77.50, significa "vida" o "existencia animada".

La palabra en inglés antiguo está relacionada con otros términos germánicos históricos para la misma idea, incluido el frisón antiguo sēle, sēl (que también podría significar "salvación" o "juramento solemne"), gótico saiwala, alto alemán antiguo sēula, sēla, sajón antiguo sēola y nórdico antiguo sala. Los cognados actuales incluyen el holandés ziel y el alemán Seele.

Puntos de vista religiosos

En el judaísmo y en algunas denominaciones cristianas, solo los seres humanos tienen almas inmortales (aunque la inmortalidad se disputa dentro del judaísmo y el concepto de inmortalidad probablemente fue influenciado por Platón). Por ejemplo, Tomás de Aquino, tomando prestado directamente de Sobre el alma de Aristóteles, atribuyó "alma" (anima) a todos los organismos, pero argumentó que solo las almas humanas son inmortales.Otras religiones (sobre todo el hinduismo y el jainismo) creen que todos los seres vivos, desde la bacteria más pequeña hasta el mamífero más grande, son almas (Atman, jiva) y tienen su representante físico (el cuerpo) en el mundo. El yo real es el alma, mientras que el cuerpo es solo un mecanismo para experimentar el karma de esa vida. Por lo tanto, si uno ve un tigre, entonces hay una identidad autoconsciente que reside en él (el alma) y un representante físico (el cuerpo entero del tigre, que es observable) en el mundo. Algunos enseñan que incluso las entidades no biológicas (como ríos y montañas) poseen almas. Esta creencia se llama animismo.

Antiguo Cercano Oriente

En la antigua religión egipcia, se creía que un individuo estaba compuesto de varios elementos, algunos físicos y otros espirituales. Ideas similares se encuentran en la antigua religión asiria y babilónica. La estela de Kuttamuwa, una estela funeraria para un funcionario real de Sam'al del siglo VIII a. C., describe a Kuttamuwa solicitando que sus dolientes conmemoren su vida y su vida futura con fiestas "para mi alma que está en esta estela". Es una de las primeras referencias a un alma como una entidad separada del cuerpo. La estela de basalto de 800 libras (360 kg) mide 3 pies (0,91 m) de alto y 2 pies (0,61 m) de ancho. Fue descubierto en la tercera temporada de excavaciones de la Expedición Neubauer del Instituto Oriental en Chicago, Illinois.

Bahaísmo

La Fe baháʼí afirma que "el alma es un signo de Dios, una joya celestial cuya realidad los hombres más eruditos no han logrado comprender, y cuyo misterio ninguna mente, por aguda que sea, puede esperar desentrañar". Bahá'u'lláh afirmó que el alma no sólo continúa viviendo después de la muerte física del cuerpo humano, sino que, de hecho, es inmortal. El cielo puede verse en parte como el estado de cercanía del alma a Dios; y el infierno como un estado de lejanía de Dios. Cada estado sigue como una consecuencia natural de los esfuerzos individuales, o la falta de ellos, para desarrollarse espiritualmente. Bahá'u'lláh enseñó que los individuos no tienen existencia anterior a su vida aquí en la tierra y la evolución del alma es siempre hacia Dios y lejos del mundo material.

Cristiandad

Según una escatología cristiana común, cuando las personas mueren, sus almas serán juzgadas por Dios y determinadas a ir al Cielo o al Hades en espera de la resurrección. Las ramas más antiguas del cristianismo, la Iglesia católica y las iglesias ortodoxa oriental y oriental, se adhieren a este punto de vista, así como la mayoría de las denominaciones protestantes. Una minoría de cristianos protestantes entiende el alma simplemente como "vida" y cree que los muertos no tienen existencia consciente hasta después de la resurrección (condicionalismo cristiano). Algunos cristianos protestantes creen que las almas y los cuerpos de los injustos serán destruidos en el infierno en lugar de sufrir eternamente (aniquilacionismo). Los creyentes heredarán la vida eterna ya sea en el Cielo o en un Reino de Dios en la tierra, y disfrutarán de la comunión eterna con Dios.

Origen del alma

El "origen del alma" ha proporcionado una pregunta desconcertante en el cristianismo. Las principales teorías presentadas incluyen el creacionismo del alma, el traducianismo y la preexistencia. De acuerdo con el creacionismo del alma, Dios crea cada alma individual directamente, ya sea en el momento de la concepción o en un momento posterior. Según el traducianismo, el alma proviene de los padres por generación natural. Según la teoría de la preexistencia, el alma existe antes del momento de la concepción. Ha habido diferentes pensamientos con respecto a si los embriones humanos tienen alma desde la concepción, o si hay un punto entre la concepción y el nacimiento en el que el feto adquiere alma, conciencia y/o personalidad. Las posturas en esta pregunta podrían desempeñar un papel en los juicios sobre la moralidad del aborto.

Tricotomía del alma

Agustín (354-430), uno de los primeros pensadores cristianos más influyentes del cristianismo occidental, describió el alma como "una sustancia especial, dotada de razón, adaptada para gobernar el cuerpo". Algunos cristianos defienden una visión tricotómica de los humanos, que caracteriza a los humanos como compuestos de un cuerpo (soma), alma (psique) y espíritu (pneuma).Sin embargo, la mayoría de los eruditos bíblicos modernos señalan cómo los conceptos de "espíritu" y "alma" se usan indistintamente en muchos pasajes bíblicos y, por lo tanto, sostienen la dicotomía: la opinión de que cada ser humano comprende un cuerpo y un alma. Pablo dijo que el "cuerpo lucha contra" el alma, "Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos, y penetrante hasta dividir el alma y el espíritu" (Hebreos 4:12 LBLA), y que "golpeo mi cuerpo", para mantenerlo bajo control.

Vistas de varias denominaciones

catolicismo romano

El presente Catecismo de la Iglesia Católica afirma que el término alma“se refiere al aspecto más íntimo de [las personas], aquello que es de mayor valor en [ellas], aquello por lo cual [son] muy especialmente a imagen de Dios: 'alma' significa el principio espiritual en [la humanidad]”.

Todas las almas vivas y muertas serán juzgadas por Jesucristo cuando regrese a la tierra. La Iglesia Católica enseña que la existencia de cada alma individual depende totalmente de Dios:"La doctrina de la fe afirma que el alma espiritual e inmortal es creada inmediatamente por Dios".protestantismo

Los protestantes generalmente creen en la existencia y la inmortalidad del alma, pero se dividen en dos campos principales sobre lo que esto significa en términos de una vida después de la muerte. Algunos, siguiendo a Jean Calvin, creen que el alma persiste como conciencia después de la muerte. Otros, siguiendo a Martín Lutero, creen que el alma muere con el cuerpo, y queda inconsciente ("duerme") hasta la resurrección de los muertos.adventismo

Varios nuevos movimientos religiosos que se derivan del adventismo, incluidos los cristadelfianos, los adventistas del séptimo día y los testigos de Jehová, creen de manera similar que los muertos no poseen un alma separada del cuerpo y están inconscientes hasta la resurrección.Santos de los Últimos Días ('Mormonismo')

La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días enseña que el espíritu y el cuerpo juntos constituyen el alma del hombre (humanidad). "El espíritu y el cuerpo son el alma del hombre". Los Santos de los Últimos Días creen que el alma es la unión de un espíritu preexistente hecho por Dios y un cuerpo temporal, que se forma mediante la concepción física en la tierra.

Después de la muerte, el espíritu continúa viviendo y progresando en el mundo de los Espíritus hasta la resurrección, cuando se reúne con el cuerpo que una vez lo alojó. Esta reunión de cuerpo y espíritu da como resultado un alma perfecta que es inmortal y eterna, y capaz de recibir una plenitud de gozo.

La cosmología de los Santos de los Últimos Días también describe las "inteligencias" como la esencia de la conciencia o la agencia. Estos son coeternos con Dios y animan los espíritus. La unión de un cuerpo espiritual recién creado con una inteligencia eternamente existente constituye un "nacimiento espiritual" y justifica el título de Dios "Padre de nuestros espíritus".

Confucionismo

Algunas tradiciones confucianas contrastan un alma espiritual con un alma corpórea.

Hinduismo

Ātman es una palabra sánscrita que significa yo interior o alma. En la filosofía hindú, especialmente en la escuela Vedanta del hinduismo, Ātman es el primer principio, el verdadero yo de un individuo más allá de la identificación con los fenómenos, la esencia de un individuo. Para alcanzar la liberación (moksha), un ser humano debe adquirir autoconocimiento (atma jnana), que consiste en darse cuenta de que el propio yo verdadero (Ātman) es idéntico al yo trascendente Brahman según el Advaita Vedanta.

Las seis escuelas ortodoxas del hinduismo creen que hay Ātman (yo, esencia) en cada ser.

En el hinduismo y el jainismo, una jiva (sánscrito: जीव, jīva, ortografía alternativa jiwa; hindi: जीव, jīv, ortografía alternativa jeev) es un ser vivo, o cualquier entidad imbuida de fuerza vital.

El concepto de jiva en el jainismo es similar al de atman en el hinduismo. Sin embargo, algunas tradiciones hindúes diferencian entre los dos conceptos, con jiva considerado como el yo individual, mientras que atman como el yo universal inmutable que está presente en todos los seres vivos y todo lo demás como el Brahman metafísico. Este último a veces se denomina jiva-atman (un alma en un cuerpo vivo).

Islam

El Corán, el libro sagrado del Islam, usa dos palabras para referirse al alma: rūḥ (traducido como espíritu, conciencia, pneuma o "alma") y nafs (traducido como yo, ego, psique o "alma"), cognados de el hebreo nefesh y ruach. Los dos términos se usan indistintamente con frecuencia, aunque rūḥ se usa más a menudo para denotar el espíritu divino o "el aliento de vida", mientras que nafs designa la disposición o las características de uno. En la filosofía islámica, el inmortal rūḥ "impulsa" el nafs mortal, que comprende los deseos temporales y las percepciones necesarias para vivir. Dos de los pasajes del Corán que mencionan el rûh se encuentran en los capítulos 17 ("El viaje nocturno") y 39 ("Las tropas"):

Y te preguntan, [Oh Muhammad], sobre el Rûh. Di: "El Rûh es asunto de mi Señor. Y a la humanidad no se le ha dado conocimiento excepto un poco.—  Corán 17:85

Allah toma las almas en el momento de su muerte, y aquellas que no mueren [Él las toma] mientras duermen. Luego guarda a aquellos para los que ha decretado la muerte y libera a los demás por un término específico. En verdad en eso hay señales para un pueblo que piensa..—  Corán 39:42

Jainismo

En el jainismo, cada ser vivo, desde la planta o la bacteria hasta el ser humano, tiene un alma y el concepto constituye la base misma del jainismo. Según el jainismo, no hay principio ni fin para la existencia del alma. Es de naturaleza eterna y cambia de forma hasta que alcanza la liberación.

En el jainismo, jiva es la esencia inmortal o el alma de un organismo vivo (humano, animal, pez o planta, etc.) que sobrevive a la muerte física. El concepto de Ajiva en el jainismo significa "no alma" y representa la materia (incluido el cuerpo), el tiempo, el espacio, la inmovilidad y el movimiento. En el jainismo, un Jiva es samsari (mundano, atrapado en un ciclo de renacimientos) o mukta (liberado).

Según esta creencia, hasta el momento en que el alma se libera del saṃsāra (ciclo de nacimientos y muertes repetidos), se apega a uno de estos cuerpos en función del karma (acciones) del alma individual. Independientemente del estado en el que se encuentre el alma, tiene los mismos atributos y cualidades. La diferencia entre las almas liberadas y las no liberadas es que las cualidades y atributos se manifiestan completamente en el caso de siddha (alma liberada) ya que han superado todas las ataduras kármicas, mientras que en el caso de las almas no liberadas se exhiben parcialmente. Las almas que se alzan victoriosas sobre las emociones perversas mientras aún permanecen dentro de los cuerpos físicos se conocen como arihants.

Con respecto a la visión jainista del alma, Virchand Gandhi dijo

el alma vive su propia vida, no para el propósito del cuerpo, pero el cuerpo vive para el propósito del alma. Si creemos que el alma debe ser controlada por el cuerpo, entonces el alma pierde su poder.

Judaísmo

Los términos hebreos נפש ‎ nefesh (literalmente "ser vivo"), רוח ‎ ruach (literalmente "viento"), נשמה ‎ neshamah ( literalmente "aliento"), חיה ‎ chayah (literalmente "vida") y יחידה ‎ yechidah (literalmente " singularidad") se utilizan para describir el alma o el espíritu.

En el judaísmo, se cree que Dios le dio el alma a Adán, como se menciona en Génesis,

Entonces Jehová Dios formó al hombre del polvo de la tierra, y sopló en su nariz aliento de vida; y el hombre se convirtió en un ser viviente. Génesis 2:7

El judaísmo relaciona la calidad del alma con el cumplimiento de los mandamientos (mitzvot) y el logro de niveles más altos de comprensión y, por lo tanto, la cercanía con Dios. Una persona con tal cercanía se llama tzadik. Por lo tanto, el judaísmo abraza la conmemoración del día de la muerte de uno, nahala / Yahrtzeit y no el cumpleaños como una fiesta de recuerdo, porque solo hacia el final de las luchas, pruebas y desafíos de la vida, las almas humanas pueden ser juzgadas y acreditadas por su rectitud. El judaísmo concede gran importancia al estudio de las almas.

La Cabalá y otras tradiciones místicas profundizan en mayor detalle en la naturaleza del alma. La Cabalá separa el alma en cinco elementos, correspondientes a los cinco mundos:

  1. Nefesh, relacionado con el instinto natural.
  2. Ruach, relacionado con el intelecto y la conciencia de Dios.
  3. Neshamah, relacionado con la emoción y la moralidad.
  4. Chayah, considerado una parte de Dios, por así decirlo.
  5. Yejidá. Este aspecto es esencialmente uno con Dios.

La Cabalá también propuso un concepto de reencarnación, el gilgul. (Ver también nefesh habehamit el "alma animal".)

Algunas tradiciones judías afirman que el alma está alojada en el hueso luz, aunque las tradiciones no están de acuerdo sobre si es el atlas en la parte superior de la columna vertebral o el sacro en la parte inferior de la columna vertebral.

Cienciología

La opinión de Scientology es que una persona no tiene alma, es un alma. Es la creencia de la religión que no tienen el poder de forzar conclusiones adherentes. Por lo tanto, una persona es inmortal y puede reencarnarse si lo desea. Los scientologists ven que la futura felicidad e inmortalidad de uno, guiada por su espiritualidad, está influenciada por la forma en que vive y actúa durante su tiempo en la tierra. El término de Cienciología para el alma es "thetan", derivado de la palabra griega "theta", que simboliza el pensamiento. La consejería de Scientology (llamada auditación) se dirige al alma para mejorar las habilidades, tanto mundanas como espirituales. Las ideologías que rodean este entendimiento se alinean con las de las cinco principales religiones del mundo.

Chamanismo

El dualismo del alma (también llamado "almas múltiples" o "pluralismo dualista") es una creencia común en el chamanismo, y es esencial en el concepto central y universal de "vuelo del alma" (también llamado "viaje del alma", "viaje fuera del cuerpo"). experiencia", "éxtasis" o "proyección astral"). Es la creencia de que los humanos tienen dos o más almas, generalmente denominadas "alma del cuerpo" (o "alma de la vida") y "alma libre". El primero está relacionado con las funciones corporales y la conciencia cuando está despierto, mientras que el segundo puede deambular libremente durante el sueño o los estados de trance. En algunos casos, hay una plétora de tipos de almas con diferentes funciones.

El dualismo del alma y las almas múltiples son prominentes en las creencias animistas tradicionales de los pueblos austronesios, los chinos (hún y pò), los tibetanos, la mayoría de los pueblos africanos, la mayoría de los nativos norteamericanos, los antiguos pueblos del sur de Asia, los pueblos del norte de Eurasia y en Antiguos egipcios (ka y ba).

La creencia en el dualismo del alma se encuentra en la mayoría de las tradiciones chamánicas austronesias. La palabra proto-austronesio reconstruida para el "cuerpo alma" es * nawa ("aliento", "vida" o "espíritu vital"). Se encuentra en algún lugar de la cavidad abdominal, a menudo en el hígado o el corazón (proto-austronesio *qaCay). El "alma libre" se encuentra en la cabeza. Sus nombres generalmente se derivan del protoaustronesio * qaNiCu ("fantasma", "espíritu [de los muertos]"), que también se aplican a otros espíritus de la naturaleza no humana. El "alma libre" también se menciona en nombres que literalmente significan "gemelo" o "doble", del protoaustronesio * duSa ("dos").Se dice que una persona virtuosa es aquella cuyas almas están en armonía entre sí, mientras que una persona malvada es aquella cuyas almas están en conflicto.

Se dice que el "alma libre" deja el cuerpo y viaja al mundo de los espíritus durante el sueño, los estados de trance, el delirio, la locura y la muerte. La dualidad también se ve en las tradiciones curativas de los chamanes austronesios, donde las enfermedades se consideran una "pérdida del alma" y, por lo tanto, para curar a los enfermos, uno debe "devolver" el "alma libre" (que puede haber sido robado por un espíritu maligno). o se perdió en el mundo de los espíritus) en el cuerpo. Si el "alma libre" no puede ser devuelto, la persona afligida muere o enloquece permanentemente.

En algunos grupos étnicos, también puede haber más de dos almas. Como entre la gente de Tagbanwa, donde se dice que una persona tiene seis almas: el "alma libre" (que se considera el alma "verdadera") y cinco almas secundarias con diversas funciones.

Varios grupos inuit creen que una persona tiene más de un tipo de alma. Uno está asociado con la respiración, el otro puede acompañar al cuerpo como una sombra. En algunos casos, está relacionado con creencias chamánicas entre los diversos grupos inuit. También los grupos Caribou Inuit creían en varios tipos de almas.

El chamán cura dentro de la dimensión espiritual devolviendo partes 'perdidas' del alma humana de donde sea que hayan ido. El chamán también limpia el exceso de energías negativas, que confunden o contaminan el alma.

Sintoísmo

Shinto distingue entre las almas de las personas vivas (tamashii) y las de las personas muertas (mitama), cada una de las cuales puede tener diferentes aspectos o subalmas.

Sijismo

El sijismo considera que el alma (atma) es parte de Dios (Waheguru). Se citan varios himnos del libro sagrado Guru Granth Sahib (SGGS) que sugieren esta creencia. "Dios está en el Alma y el Alma está en Dios". El mismo concepto se repite en varias páginas del SGGS. Por ejemplo: "El alma es divina, divina es el alma. Adoradle con amor". y "El alma es el Señor, y el Señor es el alma; contemplando el Shabad, el Señor se encuentra".

El atma o alma según el sijismo es una entidad o "chispa espiritual" o "luz" en el cuerpo humano, por lo que el cuerpo puede sustentar la vida. A la salida de esta entidad del cuerpo, el cuerpo se vuelve sin vida; ninguna cantidad de manipulaciones en el cuerpo puede hacer que la persona realice alguna acción física. El alma es el "conductor" en el cuerpo. Es el roohu o espíritu o atma, cuya presencia da vida al cuerpo físico.

Muchas tradiciones religiosas y filosóficas apoyan la opinión de que el alma es la sustancia etérea, un espíritu; una chispa inmaterial, particular de un ser vivo único. Tales tradiciones a menudo consideran que el alma es tanto inmortal como innatamente consciente de su naturaleza inmortal, así como la verdadera base de la sensibilidad en cada ser vivo. El concepto del alma tiene fuertes vínculos con las nociones de una vida después de la muerte, pero las opiniones pueden variar enormemente, incluso dentro de una religión dada, en cuanto a lo que le sucede al alma después de la muerte. Muchos dentro de estas religiones y filosofías ven el alma como inmaterial, mientras que otros la consideran posiblemente material.

Taoísmo

Según las tradiciones chinas, cada persona tiene dos tipos de alma llamados hun y po (魂 y 魄), que son respectivamente yang y yin. El taoísmo cree en diez almas, sanhunqipo (三魂七魄) "tres hun y siete po ". Se dice que un ser vivo que pierde cualquiera de ellos tiene una enfermedad mental o pérdida del conocimiento, mientras que un alma muerta puede reencarnarse en una discapacidad, reinos inferiores del deseo o incluso puede ser incapaz de reencarnarse.

Zoroastrismo

Otras creencias y puntos de vista religiosos

En la referencia teológica al alma, los términos "vida" y "muerte" se consideran enfáticamente más definitivos que los conceptos comunes de "vida biológica" y "muerte biológica". Debido a que se dice que el alma es trascendente de la existencia material, y se dice que tiene (potencialmente) vida eterna, también se dice que la muerte del alma es una muerte eterna. Así, en el concepto de juicio divino, comúnmente se dice que Dios tiene opciones con respecto a la dispensación de las almas, que van desde el Cielo (es decir, ángeles) hasta el infierno (es decir, demonios), con varios conceptos intermedios. Por lo general, se dice que tanto el cielo como el infierno son eternos, o al menos mucho más allá del concepto humano típico de la vida útil y el tiempo.

Según Louis Ginzberg, el alma de Adán es la imagen de Dios. Cada alma humana también escapa del cuerpo cada noche, se eleva al cielo y de allí obtiene nueva vida para el cuerpo del hombre.

Espiritualidad, New Age y nuevas religiones

Brahma kumaris

En Brahma Kumaris, se cree que las almas humanas son incorpóreas y eternas. Dios es considerado el Alma Suprema, con grados máximos de cualidades espirituales, como la paz, el amor y la pureza.

Teosofía

En la Teosofía de Helena Blavatsky, el alma es el campo de nuestra actividad psicológica (pensamiento, emociones, memoria, deseos, voluntad, etc.) así como de los llamados fenómenos paranormales o psíquicos (percepción extrasensorial, experiencias, etc). Sin embargo, el alma no es la más alta, sino una dimensión media de los seres humanos. Más alto que el alma está el espíritu, que se considera el yo real; la fuente de todo lo que llamamos "bueno": felicidad, sabiduría, amor, compasión, armonía, paz, etc. Mientras que el espíritu es eterno e incorruptible, el alma no lo es. El alma actúa como enlace entre el cuerpo material y el yo espiritual, y por lo tanto comparte algunas características de ambos. El alma puede ser atraída hacia lo espiritual o hacia lo material, siendo así el "campo de batalla" del bien y del mal.

Antroposofía

Rudolf Steiner reivindicó las etapas tricotómicas clásicas del desarrollo del alma, que se interpenetraban entre sí en la conciencia:

Misceláneas

En Surat Shabda Yoga, el alma se considera una réplica exacta y una chispa de lo Divino. El propósito de Surat Shabd Yoga es realizar el Ser Verdadero de uno como alma (Realización del Ser), Esencia Verdadera (Realización del Espíritu) y Divinidad Verdadera (Realización de Dios) mientras se vive en el cuerpo físico.

De manera similar, el maestro espiritual Meher Baba sostuvo que "Atma, o el alma, es en realidad idéntica a Paramatma, la Superalma, que es una, infinita y eterna... [y] [el] único propósito de la creación es para el alma para disfrutar conscientemente del estado infinito de la Superalma".

Eckankar, fundada por Paul Twitchell en 1965, define Soul como el verdadero yo; la parte interior, más sagrada de cada persona.

GI Gurdjieff enseñó que los humanos no nacen con almas inmortales sino que pueden desarrollarlas a través de ciertos esfuerzos.

Puntos de vista filosóficos

Los filósofos griegos, como Sócrates, Platón y Aristóteles, entendieron que el alma (ψυχή psykhḗ) debe tener una facultad lógica, cuyo ejercicio es la más divina de las acciones humanas. En su juicio de defensa, Sócrates incluso resumió sus enseñanzas como nada más que una exhortación a sus compatriotas atenienses a sobresalir en asuntos de la psique ya que todos los bienes corporales dependen de tal excelencia (Apología 30a-b). Aristóteles razonó que el cuerpo y el alma del hombre eran su materia y forma respectivamente: el cuerpo es una colección de elementos y el alma es la esencia.

Alma o psique (griego antiguo: ψυχή psykhḗ, de ψύχειν psýkhein, "respirar", cf. latín 'anima') comprende las capacidades mentales de un ser vivo: razón, carácter, sentimiento, conciencia, qualia, memoria, percepción, pensamiento, etc. Dependiendo del sistema filosófico, un alma puede ser mortal o inmortal. Los antiguos griegos usaron la palabra "con alma" para representar el concepto de estar "vivo", lo que indica que la visión filosófica occidental más antigua que se conserva creía que el alma era lo que le daba vida al cuerpo. El alma era considerada el "soplo" incorpóreo o espiritual que anima (del latín, anima, cf. "animal") al organismo vivo.

Francis M. Cornford cita a Píndaro diciendo que el alma duerme mientras los miembros están activos, pero cuando uno duerme, el alma está activa y revela "un premio de alegría o tristeza acercándose" en los sueños.

Erwin Rohde escribe que una antigua creencia anterior a Pitágoras presentaba el alma sin vida cuando partía del cuerpo, y que se retiraba al Hades sin esperanza de volver a un cuerpo.

Platón fue el primer pensador de la antigüedad que combinó las diversas funciones del alma en una concepción coherente: el alma es lo que mueve las cosas (es decir, lo que da vida, desde el punto de vista de que la vida es movimiento propio) por medio de sus pensamientos., requiriendo que sea a la vez un motor y un pensador.

Sócrates y Platón

Basándose en las palabras de su maestro Sócrates, Platón consideraba que la psique era la esencia de una persona, siendo eso lo que decide cómo nos comportamos. Consideró que esta esencia era un ocupante incorpóreo y eterno de nuestro ser. Platón dijo que incluso después de la muerte, el alma existe y es capaz de pensar. Creía que a medida que los cuerpos mueren, el alma renace continuamente (metempsicosis) en cuerpos posteriores. Sin embargo, Aristóteles creía que solo una parte del alma era inmortal, a saber, el intelecto (logos). El alma platónica consta de tres partes:

  1. el logos, o logistikon (mente, nous o razón)
  2. el thymos, o thumetikon (emoción, espíritu o masculino)
  3. el eros, o epithumetikon (apetitivo, deseo o femenino)

Las partes están ubicadas en diferentes regiones del cuerpo:

  1. logos se ubica en la cabeza, se relaciona con la razón y regula la otra parte.
  2. thymos se encuentra cerca de la región del pecho y está relacionado con la ira.
  3. eros está ubicado en el estómago y está relacionado con los deseos de uno.

Platón también compara las tres partes del alma o psique con un sistema social de castas. Según la teoría de Platón, el alma tripartita es esencialmente lo mismo que el sistema de clases de un estado porque, para funcionar bien, cada parte debe contribuir para que el todo funcione bien. El logos mantiene reguladas las demás funciones del alma.

El alma está en el corazón de la filosofía de Platón. Francis Cornford describió los pilares gemelos del platonismo como la teoría de las formas, por un lado, y, por el otro, la doctrina de la inmortalidad del alma. De hecho, Platón fue la primera persona en la historia de la filosofía en creer que el alma era tanto la fuente de la vida como la mente. En los diálogos de Platón, encontramos que el alma desempeña muchos papeles dispares. Entre otras cosas, Platón cree que el alma es lo que da vida al cuerpo (lo que se articuló sobre todo en las Leyes y el Fedro).) en términos de auto-movimiento: estar vivo es ser capaz de moverse; el alma se mueve a sí misma. También piensa que el alma es portadora de propiedades morales (es decir, cuando soy virtuoso, es mi alma la que es virtuosa en oposición a, digamos, mi cuerpo). El alma es también la mente: es lo que piensa en nosotros.

Vemos esta oscilación casual entre los diferentes roles del alma en muchos diálogos. En primer lugar, en la República:

¿Hay alguna función del alma que no podríais cumplir con otra cosa, como ocuparse de algo (epimeleisthai), gobernar, deliberar y otras cosas por el estilo? ¿Podríamos correctamente asignar estas cosas a algo además del alma, y ​​decir que son característicos (idia) de ella?

No, a nada más.

¿Qué hay de vivir? ¿Negaremos que esta es una función del alma?

Eso es absolutamente.

El Fedón causó problemas a los estudiosos que intentaban dar sentido a este aspecto de la teoría del alma de Platón, como Sarah Broadie y Dorothea Frede.

Los estudios más recientes han anulado esta acusación argumentando que parte de la novedad de la teoría del alma de Platón es que fue la primera en unir las diferentes características y poderes del alma que se convirtieron en algo común en la filosofía antigua y medieval posterior. Para Platón, el alma mueve las cosas por medio de sus pensamientos, como dice un erudito, y en consecuencia, el alma es tanto un motor (es decir, el principio de la vida, donde la vida se concibe como un movimiento propio) y un pensador.

Aristóteles

Aristóteles (384-322 a. C.) definió el alma, o Psūchê (ψυχή), como la "primera realidad" de un cuerpo naturalmente organizado y argumentó en contra de su existencia separada del cuerpo físico. En opinión de Aristóteles, la actividad primaria, o plena actualización, de un ser vivo constituye su alma. Por ejemplo, la plena realización de un ojo, como organismo independiente, es ver (su propósito o causa final). Otro ejemplo es que la plena actualización de un ser humano sería vivir una vida humana completamente funcional de acuerdo con la razón (que él consideraba una facultad única de la humanidad).Para Aristóteles, el alma es la organización de la forma y la materia de un ser natural que le permite esforzarse por su plena realización. Esta organización entre forma y materia es necesaria para que cualquier actividad, o funcionalidad, sea posible en un ser natural. Usando un artefacto (ser no natural) como ejemplo, una casa es un edificio para la habituación humana, pero para que una casa se actualice requiere el material (madera, clavos, ladrillos, etc.) necesario para su actualidad (es decir, ser un casa totalmente funcional). Sin embargo, esto no implica que una casa tenga alma. En lo que respecta a los artefactos, la fuente de movimiento que se requiere para su completa actualización está fuera de ellos mismos (por ejemplo, un constructor construye una casa). En los seres naturales, esta fuente de movimiento está contenida en el propio ser.Aristóteles desarrolla este punto cuando habla de las facultades del alma.

Las diversas facultades del alma, como la nutrición, el movimiento (peculiar de los animales), la razón (peculiar de los humanos), la sensación (especial, común e incidental), etc., cuando se ejercitan, constituyen la "segunda" actualidad o realización., de la capacidad de estar vivo. Por ejemplo, alguien que se duerme, a diferencia de alguien que cae muerto, puede despertar y vivir su vida, mientras que este último ya no puede hacerlo.

Aristóteles identificó tres niveles jerárquicos de seres naturales: plantas, animales y personas, con tres grados diferentes de alma: Bios (vida), Zoë (vida animada) y Psuchë (vida autoconsciente). Para estos grupos, identificó tres niveles correspondientes de alma o actividad biológica: la actividad nutritiva de crecimiento, sustento y reproducción que comparte toda vida (Bios); la actividad motriz obstinada y las facultades sensoriales, que sólo tienen en común los animales y las personas (Zoë); y finalmente "razón", de la que sólo las personas son capaces (Pseuchë).

La discusión de Aristóteles sobre el alma está en su obra De Anima (Sobre el alma). Aunque en su mayoría se considera que se opone a Platón con respecto a la inmortalidad del alma, se puede encontrar una controversia en relación con el quinto capítulo del tercer libro: en este texto se pueden argumentar ambas interpretaciones, el alma en su conjunto se puede considerar mortal, y una parte llamada "intelecto activo" o "mente activa" es inmortal y eterna. Existen defensores de ambos lados de la controversia, pero se ha entendido que habrá un desacuerdo permanente sobre sus conclusiones finales, ya que ningún otro texto aristotélico contiene este punto específico, y esta parte de De Anima es oscura.Además, Aristóteles afirma que el alma ayuda a los humanos a encontrar la verdad, y comprender el verdadero propósito o función del alma es extremadamente difícil.

Avicena e Ibn al-Nafis

Siguiendo a Aristóteles, Avicena (Ibn Sina) e Ibn al-Nafis, un médico árabe, profundizaron en la comprensión aristotélica del alma y desarrollaron sus propias teorías sobre el alma. Ambos hicieron una distinción entre el alma y el espíritu, y la doctrina aviceniana sobre la naturaleza del alma fue influyente entre los escolásticos. Algunas de las opiniones de Avicena sobre el alma incluyen la idea de que la inmortalidad del alma es una consecuencia de su naturaleza y no un propósito que debe cumplir. En su teoría de "Los Diez Intelectos", vio el alma humana como el décimo y último intelecto.

Mientras estaba en prisión, Avicena escribió su famoso experimento mental del "hombre flotante" para demostrar la autoconciencia humana y la naturaleza sustancial del alma. Les dijo a sus lectores que se imaginaran suspendidos en el aire, aislados de todas las sensaciones, lo que incluye ningún contacto sensorial ni siquiera con sus propios cuerpos. Argumenta que en este escenario uno todavía tendría timidez. Por tanto, concluye que la idea del yo no depende lógicamente de ninguna cosa física, y que el alma no debe verse en términos relativos, sino como un dato primario, una sustancia. Este argumento fue luego refinado y simplificado por René Descartes en términos epistémicos, cuando afirmó: "Puedo abstraerme de la suposición de todas las cosas externas, pero no de la suposición de mi propia conciencia".

Avicena generalmente apoyó la idea de Aristóteles de que el alma se origina en el corazón, mientras que Ibn al-Nafis rechazó esta idea y, en cambio, argumentó que el alma "está relacionada con la totalidad y no con uno o unos pocos órganos". Criticó además la idea de Aristóteles según la cual cada alma única requiere la existencia de una fuente única, en este caso el corazón. Al-Nafis concluyó que "el alma no se relaciona principalmente con el espíritu ni con ningún órgano, sino con toda la materia cuyo temperamento está preparado para recibir esa alma", y definió el alma como nada más que "lo que un humano indica diciendo "yo".

Tomás de Aquino

Siguiendo a Aristóteles (a quien se refirió como "el Filósofo") y Avicena, Tomás de Aquino (1225-1274) entendió que el alma es la primera realidad del cuerpo viviente. En consecuencia, distinguió tres órdenes de vida: las plantas, que se alimentan y crecen; animales, que añaden sensación a las operaciones de las plantas; y humanos, que añaden intelecto a las operaciones de los animales.

Con respecto al alma humana, su teoría epistemológica requería que, dado que el conocedor se convierte en lo que conoce, el alma definitivamente no es corpórea: si es corpórea cuando sabe qué es alguna cosa corpórea, esa cosa vendría a estar dentro de ella. Por lo tanto, el alma tiene una operación que no depende de un órgano del cuerpo, y por lo tanto el alma puede existir sin un cuerpo. Además, dado que el alma racional de los seres humanos es una forma subsistente y no algo hecho de materia y forma, no puede ser destruida en ningún proceso natural. El argumento completo a favor de la inmortalidad del alma y la elaboración de la teoría aristotélica por parte de Tomás de Aquino se encuentra en la Pregunta 75 de la Primera Parte de la Summa Theologica.

Tomás de Aquino afirmó en la doctrina de la efusión divina del alma, el juicio particular del alma después de la separación de un cuerpo muerto, y la Resurrección final de la carne. Recordó dos cánones del De Ecclesiasticis Dogmatibus del siglo IV para los cuales "el alma racional no es engendrada por el coito" (canon XIV) y "es una y la misma alma en el hombre, que da vida al cuerpo al estar unida a y se ordena a sí mismo por su propio razonamiento". Además, creía en un alma única y tripartita, dentro de la cual están claramente presentes un alma nutritiva, sensible e intelectual. Este último es creado por Dios y es tomado únicamente por los seres humanos, incluye los otros dos tipos de alma y hace incorruptible al alma sensible.

Immanuel Kant

En sus discusiones sobre la psicología racional, Immanuel Kant (1724-1804) identificó el alma como el "yo" en el sentido más estricto y argumentó que la existencia de la experiencia interna no se puede probar ni refutar.

No podemos probar a priori la inmaterialidad del alma, sino solo hasta cierto punto: que todas las propiedades y acciones del alma no pueden ser reconocidas desde la materialidad.

Es a partir del "yo", o alma, que Kant propone la racionalización trascendental, pero advierte que tal racionalización sólo puede determinar los límites del conocimiento si ha de seguir siendo práctico.

Filosofía de la mente

El argumento del fantasma en la máquina de Gilbert Ryle, que es un rechazo del dualismo mente-cuerpo de Descartes, puede proporcionar una comprensión contemporánea del alma/mente y el problema relacionado con su conexión con el cerebro/cuerpo.

Psicología

La creencia en el alma ocupa un lugar destacado en la obra de Otto Rank que recupera la importancia de la inmortalidad en la psicología del interés primitivo, clásico y moderno por la vida y la muerte. El trabajo de Rank se opone directamente a la psicología "científica" que concede la posibilidad de la existencia del alma y la postula como objeto de investigación sin admitir realmente que existe. "Así como la religión representa un comentario psicológico sobre la evolución social del hombre, varias psicologías representan nuestras actitudes actuales hacia la creencia espiritual. En la era animista, la psicologización era una creación del alma; en la era religiosa, era una representación del alma. a uno mismo; en nuestra era de la ciencia natural es un conocimiento del alma individual". "Seelenglaube" de Rank se traduce como "Creencia del alma". El trabajo de Rank tuvo una influencia significativa en la comprensión de Ernest Becker de un interés universal en la inmortalidad. En Negación de la muerte, Becker describe el "alma" en términos del uso que hace Kierkegaard del "yo" cuando dice que "lo que llamamos esquizofrenia es un intento del yo simbólico de negar las limitaciones del cuerpo finito".

† El uso de Kierkegaard de "yo" puede ser un poco confuso. Lo usa para incluirel yo simbólico y el cuerpo físico. En realidad, es un sinónimo de "personalidad total" que va más allá de la persona para incluir lo que ahora llamaríamosel "alma" o el "fondo del ser" del que surgió la persona creada.

Ciencias

La gran mayoría de los científicos, como Julien Musolino, sostienen que la mente es una máquina compleja que opera con las mismas leyes físicas que todos los demás objetos del universo. Según Musolino, actualmente no hay evidencia científica alguna que apoye la existencia del alma y hay evidencia considerable que parece indicar que las almas no existen.

Sin embargo, se considera que la búsqueda del alma ha sido fundamental para impulsar la comprensión de la anatomía y la fisiología del cuerpo humano, particularmente en los campos de la cardiología y la neurología. En los dos conceptos conflictivos dominantes del alma, uno que la ve como espiritual e inmortal, y el otro que la ve como material y mortal, ambos han descrito que el alma está ubicada en un órgano particular o que impregna todo el cuerpo.

Neurociencia

La neurociencia como campo interdisciplinario, y su rama de la neurociencia cognitiva en particular, opera bajo el supuesto ontológico del fisicalismo. En otras palabras, asume que solo existen los fenómenos fundamentales estudiados por la física. Así, la neurociencia busca comprender los fenómenos mentales dentro del marco según el cual el pensamiento y el comportamiento humanos son causados ​​únicamente por procesos físicos que tienen lugar dentro del cerebro, y opera por la vía del reduccionismo al buscar una explicación para la mente en términos de actividad cerebral..

Para estudiar la mente en términos del cerebro, se utilizan varios métodos de neuroimagen funcional para estudiar los correlatos neuroanatómicos de varios procesos cognitivos que constituyen la mente. La evidencia de las imágenes cerebrales indica que todos los procesos de la mente tienen correlatos físicos en la función cerebral.Sin embargo, tales estudios correlacionales no pueden determinar si la actividad neuronal juega un papel causal en la ocurrencia de estos procesos cognitivos (la correlación no implica causalidad) y no pueden determinar si la actividad neuronal es necesaria o suficiente para que ocurran tales procesos. La identificación de la causalidad y de las condiciones necesarias y suficientes requiere una manipulación experimental explícita de esa actividad. Si la manipulación de la actividad cerebral cambia la conciencia, entonces se puede inferir un papel causal para esa actividad cerebral.Dos de los tipos más comunes de experimentos de manipulación son los experimentos de pérdida de función y de ganancia de función. En un experimento de pérdida de función (también llamado "necesidad"), una parte del sistema nervioso se reduce o se elimina en un intento de determinar si es necesario que ocurra cierto proceso, y en un experimento de ganancia de función. (también llamado experimento de "suficiencia"), un aspecto del sistema nervioso aumenta en relación con lo normal.Las manipulaciones de la actividad cerebral se pueden realizar con estimulación cerebral eléctrica directa, estimulación cerebral magnética mediante estimulación magnética transcraneal, manipulación psicofarmacológica, manipulación optogenética y mediante el estudio de los síntomas de daño cerebral (estudios de casos) y lesiones. Además, los neurocientíficos también están investigando cómo se desarrolla la mente con el desarrollo del cerebro.

Física

El físico Sean M. Carroll ha escrito que la idea de un alma es incompatible con la teoría cuántica de campos (QFT). Él escribe que para que exista un alma: "No solo se requiere una nueva física, sino una física dramáticamente nueva. Dentro de QFT, no puede haber una nueva colección de 'partículas espirituales' y 'fuerzas espirituales' que interactúan con nuestros átomos regulares, porque los habríamos detectado en experimentos existentes".

Se ha invocado el indeterminismo cuántico como un mecanismo explicativo de la posible interacción alma/cerebro, pero el neurocientífico Peter Clarke encontró errores con este punto de vista, señalando que no hay evidencia de que tales procesos desempeñen un papel en la función cerebral; Clarke concluyó que un alma cartesiana no tiene base en la física cuántica.

Parasicología

Algunos parapsicólogos han intentado establecer, mediante experimentos científicos, si existe un alma separada del cerebro, como se define más comúnmente en la religión que como sinónimo de psique o mente. Milbourne Christopher (1979) y Mary Roach (2010) han argumentado que ninguno de los intentos de los parapsicólogos ha tenido éxito todavía.

Peso del alma

En 1901, Duncan MacDougall realizó un experimento en el que midió el peso de los pacientes mientras morían. Afirmó que hubo una pérdida de peso de cantidades variables en el momento de la muerte; concluyó que el alma pesaba 21 gramos, basándose en las mediciones de un solo paciente y descartando resultados contradictorios. El físico Robert L. Park escribió que los experimentos de MacDougall "hoy no se considera que tengan ningún mérito científico" y el psicólogo Bruce Hood escribió que "debido a que la pérdida de peso no era confiable ni replicable, sus hallazgos no eran científicos".