Tormenta roja naciente

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Novela de Tom Clancy

Red Storm Rising es una novela de guerra, escrita por Tom Clancy y coescrita con Larry Bond, y publicada el 7 de agosto de 1986. Ambientada a mediados de 1980, presenta una Tercera Guerra Mundial entre la Organización del Tratado del Atlántico Norte y las fuerzas del Pacto de Varsovia, y es único porque describe el conflicto como una lucha exclusiva con armas convencionales, en lugar de escalar hacia el uso de armas de destrucción masiva o guerra nuclear. Es una de las dos novelas de Clancy, junto con SSN (1996), que no están ambientadas en Ryanverse.

El libro debutó en el número uno en la lista de libros más vendidos del New York Times. Con el tiempo, prestó su nombre a la empresa de desarrollo de juegos Red Storm Entertainment, que Clancy cofundó en 1997.

Trama

Militantes del Azerbaiyán soviético destruyen una refinería de producción de petróleo en Nizhnevartovsk, amenazando con paralizar la economía de la Unión Soviética debido a la escasez de petróleo. Después de mucha deliberación, el Politburó soviético decide apoderarse del Golfo Pérsico por la fuerza militar para recuperar las pérdidas de petróleo del país. Sabiendo que Estados Unidos se había comprometido a defender a los países productores de petróleo en el Golfo Pérsico, los soviéticos deciden que neutralizar a la OTAN es un primer paso necesario antes de que pueda llevarse a cabo su operación militar. Si Alemania Occidental fuera neutralizada y ocupada, los soviéticos creen que Estados Unidos no actuaría para rescatar a los estados árabes, ya que podría satisfacer sus necesidades de petróleo solo en el hemisferio occidental.

Para desviar la atención de la operación inminente, el Politburó se embarca en una elaborada maskirovka para disfrazar tanto su situación como sus intenciones. Los soviéticos declaran públicamente su propuesta de reducción de armas para desechar sus obsoletos submarinos de misiles nucleares. Luego, la KGB lleva a cabo una operación de bandera falsa que involucra la detonación de una bomba en un edificio del Kremlin, incriminando a un agente durmiente de la KGB como un espía de inteligencia de Alemania Occidental involucrado en el incidente. El Politburó denuncia públicamente al gobierno de Alemania Occidental y pide represalias.

A pesar de que un ataque planeado contra una instalación de comunicaciones de la OTAN en Lammersdorf se vio comprometido cuando un oficial de Spetsnaz fue arrestado, el ejército soviético sigue adelante con sus operaciones de avanzada en Alemania. Sin embargo, sufren reveses en la primera noche de la guerra, cuando los aviones furtivos y cazabombarderos de la OTAN logran la superioridad aérea sobre Europa Central al eliminar los aviones de combate y AEW&C soviéticos, y al destruir puentes clave que gran parte del ejército soviético aún no ha logrado. cruz.

Sin embargo, la Marina soviética logra una victoria temprana decisiva contra un grupo de batalla combinado de portaaviones de la Marina de los EE. UU. formado por el USS Nimitz, el USS Saratoga, el portaaviones francés Foch, el USS Saipan y sus escoltas. resultando en el hundimiento de Foch y Saipan, mientras que Nimitz se ve obligado a pasar semanas en dique seco en reparación. Esto permite que un asalto anfibio soviético con un puente aéreo de seguimiento ocupe con éxito Islandia, tomando el control de la base aérea de la OTAN en Keflavík, asegurando el mando de la brecha GIUK estratégicamente importante. Un teniente de la Fuerza Aérea de los EE. UU., Mike Edwards, escapa del ataque con un escuadrón de infantes de marina de los EE. UU. y se esconde en el campo, observando las operaciones de vuelo soviéticas y la llegada de los MiG-29 a Keflavik, y sirviendo como explorador para las fuerzas de la OTAN que operan desde Escocia, dado el distintivo de llamada "Beagle" después de que se verificara su buena fe. Los soviéticos también ocupan el norte de Noruega, poniendo el radar de la OTAN y las estaciones aéreas en Escocia dentro del alcance de un ataque aéreo sostenido de Long Range Aviation.

La OTAN y las fuerzas aéreas y terrestres soviéticas luchan ferozmente en Alemania, y ambos bandos sufren grandes pérdidas. El general coronel Pavel Alekseyev, el alto comandante soviético de facto sobre el terreno, logra un gran avance en una batalla de tanques en Alfeld, lo que abre la posibilidad de un avance soviético más allá del río Weser con mucha menos oposición de las fuerzas de la OTAN. Mientras tanto, un ataque naval a las bases de bombarderos soviéticos con misiles de crucero lanzados por submarinos de la OTAN allana el camino para un asalto anfibio en Islandia, retomando la isla y cerrando efectivamente el Atlántico a las fuerzas soviéticas. Mientras Edwards es primero reforzado por un escuadrón de Royal Marines y luego rescatado por los U.S. Marines, un prisionero soviético capturado durante la reconquista de Islandia revela la verdadera causa de la guerra, y una ofensiva aérea de la OTAN destruye rápidamente gran parte del ejército soviético.;s suministros de combustible fácilmente disponibles.

Con la reconquista de Islandia, Estados Unidos puede reabastecer al resto de la OTAN a través de las rutas marítimas reabiertas. En este punto, las formaciones de tanques y bombarderos estratégicos soviéticos han sufrido grandes pérdidas, obligándolos a ceder aún más la iniciativa mientras la OTAN se prepara para montar una contraofensiva decisiva. El liderazgo soviético comienza a darse cuenta de que enfrenta la posibilidad de una derrota absoluta, ya sea a través de un avance militar de la OTAN o una guerra de desgaste que, dada su desesperada falta de suministros de petróleo, equivaldría al mismo resultado. El Secretario General considera usar armas nucleares para forzar un final favorable a la guerra. Esto enfurece a Alekseyev, que se había estado movilizando para un contraataque final contra Alemania pero se enfrenta a la ejecución por parte del gobierno soviético por su lento calendario. El jefe de la KGB organiza un golpe junto con Alekseyev y otros miembros del Politburó. Luego, el nuevo gobierno soviético negocia un alto el fuego con la OTAN y un regreso al status quo ante bellum, poniendo fin a la guerra.

Personajes

OTAN

Unión Soviética

Otros personajes

Temas

Las lealtades de las naciones involucradas en la guerra descrita en el libro.

Red Storm Rising representa una futura Tercera Guerra Mundial, principalmente entre los Estados Unidos y la Unión Soviética. Sigue la "guerra futura" género popularizado por primera vez por la novela de 1871 The Battle of Dorking de George Tomkyns Chesney, así como la novela de ciencia ficción The War in the Air (1908) de H.G. Wells. Red Storm Rising es inusual entre los ejemplos del género de la Guerra Fría, ya que presentó una guerra librada en su totalidad con armas convencionales en lugar de armas nucleares o químicas. Por ejemplo, La Tercera Guerra Mundial: agosto de 1985 describe un conflicto basado en suposiciones bastante similares, pero que involucra un uso intensivo de armas químicas y un uso limitado de armas nucleares estratégicas al final del conflicto.

Según un documento publicado por los Archivos Nacionales del Reino Unido en diciembre de 2015, el presidente de los Estados Unidos, Ronald Reagan, había recomendado Red Storm Rising a la primera ministra del Reino Unido, Margaret Thatcher, poco después de la Cumbre de Reykjavík en 1986 entre él y la Unión Soviética. secretario general Mikhail Gorbachev para comprender las intenciones y la estrategia de la Unión Soviética. Algunos de los sistemas de armas avanzados descritos en la novela se desplegaron cuatro años después en la Guerra del Golfo.

Desarrollo

Tom Clancy conoció a Larry Bond en 1982. Clancy había comprado el juego de guerra Harpoon de Bond como fuente principal para su futura novela La caza del Octubre Rojo (1984).). Utilizaron las reglas de miniaturas de la segunda edición del juego de mesa para probar secuencias de batalla clave, en particular la operación soviética para apoderarse de Islandia y el ataque al grupo de batalla del portaaviones en la 'Danza de los vampiros'. capítulo, con Bond arbitrando las sesiones de juego, que generalmente involucraban a varios jugadores en cada lado (Clancy entre ellos) actuando en varios roles. Los dos hablaron sobre Convoy-84, un juego de guerra en el que Bond había estado trabajando en ese momento que presentaba una nueva Batalla del Atlántico Norte. La idea se convirtió en la base de Red Storm Rising. "Elaboramos el libro juntos, luego, mientras yo investigaba los asuntos militares, Tom escribió el libro," dijo Bond. "Aparezco como coautor, pero escribí como el 1 por ciento del libro," Bond declaró en una entrevista de 2013. Para investigar las escenas del Politburó, Clancy y Bond entrevistaron al desertor soviético Arkady Shevchenko.

Publicación

En 1987, el libro se publicó en francés como Tempête Rouge (Tormenta roja), traducido por France-Marie Watkins, con la colaboración de Jean Sabbagh.

Recepción

Al igual que su predecesor, La caza del Octubre Rojo, el libro recibió elogios de la crítica por su precisa narrativa militar. Publishers Weekly la elogió como "una historia fascinante y totalmente creíble, contada con autenticidad y gran suspenso". Kirkus Reviews lo aclamó como "una especulación informativa, amena y a veces deslumbrante sobre la guerra de las superpotencias".

Adaptaciones del juego

En diciembre de 1988, MicroProse lanzó un juego de computadora Red Storm Rising, en el que el jugador comandaba un submarino estadounidense contra las fuerzas soviéticas. El jugador tenía la opción de elegir entre misiones individuales o campaña y en qué era jugar; Las misiones modernas ofrecían al jugador submarinos y armas más avanzados, pero también un adversario tecnológicamente más avanzado.

En 1989, TSR, Inc. lanzó el juego de mesa Red Storm Rising diseñado por Douglas Niles, basado en el libro. El juego ganó el Premio Origins al Mejor Juego de Mesa Moderno y Mejor Presentación Gráfica de un Juego de Mesa en 1989.