Tama-nui-te-ra
En la mitología maorí, Tama-nui-te-rā (Tamanuiterā) es la personificación del Sol.
Etimología
En lengua maorí, Tama-nui-te-rā significa "Gran Hijo del Sol". La palabra maorí para "sol" o "día" es rā, derivado del protopolinesio *laqaa.
Leyendas
Según la mitología maorí, una vez el sol se movió por el cielo tan rápido que no había suficiente tiempo en el día para que las personas completaran sus tareas. El semidiós Māui, junto con sus hermanos, viajó hasta donde Tama-nui-te-rā se levantó del inframundo y tendió cuerdas para atraparlo, luego lo golpeó para hacerlo viajar más lentamente por el cielo. Se dice que los rayos del sol son restos de las cuerdas que ralentizan el viaje del sol por el cielo.
Familia
En algunas leyendas, Tama-nui-te-rā es el esposo de Ārohirohi, diosa de los espejismos. En otras leyendas, Tama-nui-te-rā tenía dos esposas, la doncella de verano, Hinaumati, y la doncella de invierno, Hinetakurua. Durante el año dividía su tiempo entre sus dos esposas, esto marcaba el cambio de las estaciones y el cambio de posición del sol en el cielo. En invierno, la salida del sol en el cielo del noreste marcaba la residencia de Tama-nui-te-rā con Hinaumati. Después del solsticio de invierno, el cambio de posición del sol hacia el cielo del sureste se describió como Tama-nui-te-rā regresando a Hinaumati.
Al hijo de Tama-nui-te-rā e Hinaumati, Tane-rore, se le atribuye el origen de la danza.
Otro hijo de Tama-nui-te-ra es Auahitūroa, dios de los cometas y los fuegos, y los nietos de Tama-nui-te-rā son Ngā Mānawa.
Contenido relacionado
Mirtilo
Mapoños
Víðarr