Rheinmetall RMK30
El RMK 30 (Rückstoßfreie Maschinenkanone 30; cañón automático sin retroceso) es un cañón automático sin retroceso de calibre 30 mm que dispara cartuchos de munición sin vaina de 30 × 250 mm. El arma fue desarrollada por la empresa alemana Mauser, que ahora es una filial del grupo Rheinmetall.

El Bundesamt für Wehrtechnik und Beschaffung (BWB) alemán necesitaba un nuevo cañón automático sin retroceso, por lo que el desarrollo del RMK 30 comenzó en 1993. A diferencia de las armas sin retroceso anteriores, es capaz de disparar salvas o en modo completamente automático sin producir retroceso. Es un cañón revólver de tres recámaras; El revólver y el mecanismo de disparo son accionados por un motor eléctrico, lo que permite velocidades de disparo variables de hasta 300 disparos/min. Una fracción de los gases propulsores se expulsa a la parte trasera del cañón, compensando el retroceso y permitiendo montajes más ligeros y menos rígidos.
Aunque no tiene retroceso, el RMK 30 tiene una energía de boca mayor que los cañones automáticos convencionales de 30 mm.
Se han propuesto cañones RMK 30 como mejora para los helicópteros de ataque Tiger UHT de la Bundeswehr (fuerzas armadas alemanas). La versión UHT actualmente carece de arma, ya que el ejército alemán no estaba contento con el retroceso, la precisión y el alcance del cañón francés GIAT de 30 mm que está instalado en otras versiones Tiger.
En 1996 se probó montado en un AWC Wiesel.
Un estudio inusual (Proyecto MORAINE) sugiere montar un cañón RMK 30 en un mástil retráctil en un submarino Tipo 212. Estos mástiles ampliarían las capacidades de los submarinos, que actualmente carecen de medios adecuados para luchar contra pequeños objetivos de superficie o simplemente dar disparos de advertencia. Este estudio ha conducido directamente al concepto Muraena.
Galería
- Mástil MURAENA para RMK30 (Project MORAINE) en TechDemo 2008