Protocolo de guaifenesina

El protocolo de guaifenesina es un tratamiento no aprobado para la fibromialgia sugerido en la década de 1990 por R. Paul St. Amand. El protocolo consta de tres partes: ajustar la dosis de guaifenesina, evitar los salicilatos y seguir una dieta baja en carbohidratos si el paciente tiene hipoglucemia. La guaifenesina no ha sido aprobada por la FDA para el tratamiento de la fibromialgia y no se ha demostrado que el protocolo sea eficaz en ensayos clínicos. A pesar de la falta de eficacia clínica, muchos han adoptado el protocolo debido a la evidencia anecdótica de éxito.
Eficacia
Los resultados del único ensayo clínico aleatorio reportado en 1996 encontraron que la guaifenesina no tuvo efectos significativos sobre el dolor, otros síntomas o medidas de laboratorio (niveles séricos y urinarios de ácido úrico y fosfato) durante 12 meses en una muestra de personas diagnosticadas con Síndrome de fibromialgia. El autor principal del estudio ha sugerido una serie de razones por las que algunos pacientes pueden haber informado previamente beneficios con este protocolo, y concluyó que "St. Amand, sin saberlo, ha utilizado guaifenesina como un poderoso enfoque en un programa de terapia cognitivo-conductual, en el que su empatía, entusiasmo y carisma fueron los verdaderos instrumentos para lograr un cambio beneficioso. St. Amand, quien participó como "asesor de estudio" a este ensayo clínico, ha afirmado que el estudio no controló el uso de salicilatos y, por tanto, no estudió el protocolo en su conjunto. Ha recomendado que se realice un estudio de seguimiento que controle todos los elementos del protocolo. El autor principal del estudio responde que ninguno de los sujetos mostró signos de uso de salicilatos.