Microglobulina beta-2

format_list_bulleted Contenido keyboard_arrow_down
ImprimirCitar

La β2 microglobulina (B2M) es un componente de las moléculas del CMH de clase I. Las moléculas del CMH de clase I tienen las proteínas α1, α2 y α3 que están presentes en todas las células nucleadas (excepto los glóbulos rojos). En los seres humanos, la proteína β2 microglobulina está codificada por el gen B2M.

Estructura y función

Representación esquemática de la clase I del MHC

La microglobulina β2 se encuentra junto a la cadena α3 en la superficie celular. A diferencia de la α3, la β2 no tiene región transmembrana. Directamente encima de la β2 (es decir, más alejada de la célula) se encuentra la cadena α1, que a su vez se encuentra junto a la α2.

La β2 microglobulina se asocia no sólo con la cadena alfa de las moléculas del MHC de clase I, sino también con moléculas similares a la clase I, como CD1 (5 genes en humanos), MR1, el receptor Fc neonatal (FcRn) y Qa-1 (una forma de aloantígeno). Sin embargo, el gen de la β2 microglobulina está fuera del locus del MHC (HLA), en un cromosoma diferente.

Una función adicional es la asociación con la proteína HFE, que regulan conjuntamente la expresión de hepcidina en el hígado, que se dirige al transportador de hierro ferroportina en la membrana basolateral de los enterocitos y la membrana celular de los macrófagos para su degradación, lo que da como resultado una menor absorción de hierro de los alimentos y una menor liberación de hierro de los glóbulos rojos reciclados en el sistema fagocítico mononuclear (SMP), respectivamente. La pérdida de esta función causa un exceso de hierro y hemocromatosis.

En una infección por citomegalovirus, una proteína viral se une a la β2 microglobulina, impidiendo el ensamblaje de las moléculas del MHC de clase I y su transporte a la membrana plasmática.

Se han diseñado modelos de ratones deficientes en el gen de la β2 microglobulina. Estos ratones demuestran que la β2 microglobulina es necesaria para la expresión en la superficie celular del MHC de clase I y la estabilidad del surco de unión del péptido. De hecho, en ausencia de β2 microglobulina, se pueden detectar cantidades muy limitadas de moléculas del MHC de clase I (clásicas y no clásicas) en la superficie (síndrome del linfocito desnudo o SLB). En ausencia del MHC de clase I, las células T CD8+ no pueden desarrollarse. (Las células T CD8+ son un subconjunto de células T involucradas en el desarrollo de la inmunidad adquirida.)

Importancia clínica

En pacientes que reciben hemodiálisis a largo plazo, puede acumularse en fibras amiloides que se depositan en los espacios articulares, una enfermedad conocida como amiloidosis relacionada con la diálisis.

Los niveles bajos de β2 microglobulina pueden indicar que no hay progresión del VIH.

Los niveles de β2 microglobulina pueden estar elevados en el mieloma múltiple y el linfoma, aunque en estos casos la amiloidosis primaria (cadena ligera amiloide) y la amiloidosis secundaria (proteína asociada a amiloide) son más comunes. El valor normal de β2 microglobulina es < 2 mg/L. Sin embargo, con respecto al mieloma múltiple, los niveles de β2 microglobulina también pueden estar en el otro extremo del espectro. Las pruebas de diagnóstico para el mieloma múltiple incluyen la obtención del nivel de β2 microglobulina, ya que este nivel es un indicador pronóstico importante. A partir de 2011, se espera que un paciente con un nivel < 4 mg/L tenga una supervivencia media de 43 meses, mientras que uno con un nivel > 4 mg/L tiene una supervivencia media de solo 12 meses. Sin embargo, los niveles de β2 microglobulina no permiten distinguir entre la gammapatía monoclonal de significado incierto (GMSI), que tiene un mejor pronóstico, y el mieloma latente (de bajo grado).

Se han descrito mutaciones con pérdida de función en este gen en pacientes con cáncer que no responden a inmunoterapias.

Relevancia del virus

Se ha demostrado que la β2 microglobulina es de gran importancia para la entrada viral del virus Coxsackie A9 y del virus Vaccinia (un virus de la viruela). En el caso del virus Coxsackie A9, es probable que la β2 microglobulina sea necesaria para el transporte a la membrana plasmática del receptor identificado, el receptor Fc neonatal humano (FcRn). Sin embargo, la función específica del virus Vaccinia aún no se ha dilucidado.

Más resultados...
Tamaño del texto:
undoredo
format_boldformat_italicformat_underlinedstrikethrough_ssuperscriptsubscriptlink
save