Luis Spohr

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compositor alemán, violinista y director (1784-1859)
Spohr self-portrait

Louis Spohr ( [ˈluːi ˈʃpo:ɐ], 5 de abril de 1784 - 22 de octubre de 1859), bautizado Ludewig Spohr, más tarde a menudo en la forma alemana moderna del nombre Ludwig, fue un compositor, violinista y director de orquesta alemán. Muy respetado durante su vida, Spohr compuso diez sinfonías, diez óperas, dieciocho conciertos para violín, cuatro conciertos para clarinete, cuatro oratorios y varias obras para pequeños conjuntos, música de cámara y canciones artísticas. Spohr inventó la mentonera de violín y la marca de ensayo orquestal. Su producción abarca la transición entre la música clásica y la romántica, pero cayó en el olvido tras su muerte, cuando su música rara vez se escuchaba. A finales del siglo XX se produjo un resurgimiento del interés por su obra, especialmente en Europa.

Vida

Spohr nació en Braunschweig en el ducado de Brunswick-Wolfenbüttel de Karl Heinrich Spohr y Juliane Ernestine Luise Henke, pero en 1786 la familia se mudó a Seesen. El primer estímulo musical de Spohr provino de sus padres: su madre era una talentosa cantante y pianista, y su padre tocaba la flauta. Un violinista llamado Dufour le dio su primera enseñanza de violín. Los primeros intentos de composición del alumno datan de principios de la década de 1790. Dufour, reconociendo el talento musical del niño, persuadió a sus padres para que lo enviaran a Brunswick para recibir más instrucción.

Busto de Spohr

El fracaso de su primera gira de conciertos, una aventura mal planificada en Hamburgo en 1799, hizo que pidiera ayuda financiera al duque Karl Wilhelm Ferdinand de Brunswick. Un concierto exitoso en la corte impresionó tanto al duque que contrató a Spohr, de 15 años, como músico de cámara. En 1802, gracias a los buenos oficios del duque, se convirtió en alumno de Franz Eck y lo acompañó en una gira de conciertos que lo llevó hasta San Petersburgo. Eck, quien volvió a entrenar completamente a Spohr en la técnica del violín, fue un producto de la escuela de Mannheim, y Spohr se convirtió en su heredero más destacado. Las primeras composiciones notables de Spohr, incluido su Concierto para violín n.º 1, datan de esta época. Después de su regreso a casa, el duque le concedió permiso para realizar una gira de conciertos por el norte de Alemania. Un concierto en Leipzig en diciembre de 1804 puso de rodillas al influyente crítico musical Friedrich Rochlitz," no solo por la forma de tocar de Spohr sino también por sus composiciones. Este concierto le dio al joven fama de la noche a la mañana en todo el mundo de habla alemana.

En 1805, Spohr obtuvo un puesto como concertino en la corte de Gotha, donde permaneció hasta 1812. Allí conoció a la arpista y pianista Dorette Scheidler, de 18 años, hija de uno de los cantantes de la corte. Se casaron el 2 de febrero de 1806 y vivieron felices hasta la muerte de Dorette 28 años después. Actuaron juntos con éxito como dúo de violín y arpa (Spohr compuso la Sonata en do menor para violín y arpa para ella), realizaron giras por Italia (1816–1817), Inglaterra (1820) y París (1821), pero Dorette abandonó más tarde. su carrera de arpista y se concentró en criar a sus hijos.

En 1808, Spohr practicó con Beethoven en la casa de este último, trabajando en el Piano Trio, op. 70 No. 1, El Fantasma. Spohr escribió que el piano estaba desafinado y que la forma de tocar de Beethoven era áspera o descuidada. En 1812, Spohr dirigió un concierto en la Predigerkirche del Principado de Erfurt ocupado por los franceses para celebrar a Napoleón's 43 cumpleaños. Spohr trabajó más tarde como director de orquesta en el Theatre an der Wien de Viena (1813-1815), donde siguió manteniendo una relación amistosa con Beethoven; posteriormente fue director de ópera en Frankfurt (1817–1819), donde pudo montar sus propias óperas, la primera de las cuales, Fausto, había sido rechazada en Viena. El período de empleo más largo de Spohr, desde 1822 hasta su muerte en Kassel, fue como director de música en la corte de Kassel de Guillermo II, elector de Hesse, recientemente sucedido, cargo que se le ofreció por sugerencia de Carl María von Weber. En Kassel, el 3 de enero de 1836, se casó con su segunda esposa, Marianne Pfeiffer, de 29 años, hija del jurista Burkhard Wilhelm Pfeiffer. Ella le sobrevivió por muchos años, viviendo hasta 1892.

En 1851, el elector se negó a firmar el permiso de Spohr's dos meses' permiso de ausencia, al que tenía derecho en virtud de su contrato, y cuando el músico partía sin el permiso, se descontaba una parte de su salario. En 1857 fue jubilado, muy en contra de su propia voluntad, y en el invierno del mismo año se rompió el brazo, accidente que puso fin a su forma de tocar el violín. Sin embargo, dirigió su ópera Jessonda en el quincuagésimo aniversario del Conservatorio de Praga al año siguiente. En 1859 murió en Kassel.

Al igual que Haydn, Mozart y su propio Hummel contemporáneo un poco mayor, Spohr era un masón activo. También participó activamente como instructor de violín y tuvo alrededor de 200 alumnos a lo largo de su carrera, muchos de los cuales se convirtieron en músicos famosos. Sus alumnos notables incluyeron a los violinistas Henry Blagrove y Henry Holmes. Ver: Lista de estudiantes de música por profesor: R a S#Louis Spohr.

Obras

Sechs Deutsche Lieder, Op. 103
1. Sei todavía, mein Herz
2. Zwiegesang
3. Sehnsucht
4. Wiegenlied
5. Das heimliche Lied
6. ¡Wach auf!
Soprano Montserrat Alavedra[ca] se une a William McColl, clarinete (ca 1820), y Joseph Levine, fortepiano
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Como compositor, Spohr produjo más de 150 obras con números de opus, además de casi 140 obras sin tales números. Escribió música en todos los géneros. Sus nueve sinfonías (una décima fue completada, pero retirada: Cf.) muestran un progreso del estilo clásico de sus predecesores a la música de programa: su sexta sinfonía representa estilos sucesivos de "Bach–Handel" a los modernos; su séptima sinfonía representa lo 'sagrado y secular en la vida humana' con doble orquesta; y su novena sinfonía representa Die Jahreszeiten (Las Estaciones). (La partitura autógrafa de la décima sinfonía, que contiene la obra completa, está en poder de la Staatsbibliothek Berlin. Además, la misma institución posee un juego completo de partes copiadas. Cf. también). Entre 1803 y 1844, Spohr escribió más conciertos para violín que cualquier otro compositor de la época, dieciocho en total, incluidas las obras que quedaron inéditas a su muerte. Algunos de ellos son formalmente poco convencionales, como el Concierto No. 8 de un movimiento, que tiene el estilo de un aria de ópera, y que todavía se revive periódicamente (Jascha Heifetz lo defendió), más recientemente en una grabación de 2006 de Hilary Hahn.. También hay dos conciertos para violín doble. Sin embargo, hoy en día son más conocidos los cuatro conciertos para clarinete, todos escritos para el virtuoso Johann Simon Hermstedt, que han establecido un lugar seguro entre los clarinetistas. repertorio.

Entre la música de cámara de Spohr hay una serie de no menos de 36 cuartetos de cuerda, así como cuatro cuartetos dobles para dos cuartetos de cuerda. También escribió una variedad de otros cuartetos, dúos, tríos, quintetos y sextetos, un octeto y un noneto, obras para violín solo y para arpa solo, y obras para violín y arpa para que él y su esposa las toquen juntos.

Aunque oscuras hoy en día, las óperas de Spohr Faust (1816), Zemire und Azor (1819) y Jessonda (1823) permaneció en el repertorio popular durante el siglo XIX y hasta bien entrado el XX, cuando Jessonda fue prohibida por los nazis porque representaba a un héroe europeo enamorado de una princesa india. Spohr también escribió 105 canciones y duetos, muchos de ellos recopilados como Deutsche Lieder (Canciones alemanas), así como una misa y otras obras corales. La mayoría de sus óperas eran poco conocidas fuera de Alemania, pero sus oratorios, en particular Die letzten Dinge (1825–1826), fueron muy admirados durante el siglo XIX en Inglaterra y Estados Unidos. Este oratorio fue traducido por Edward Taylor (1784–1863) y representado como El juicio final en 1830 por primera vez. Durante la era victoriana, Gilbert y Sullivan lo mencionaron en el acto 2 de The Mikado en una canción del personaje principal.

Spohr, con sus dieciocho conciertos para violín, ganó un lugar destacado en la literatura musical del siglo XIX. Se esforzó (sin ningún buen resultado) en hacer del concierto una composición sustancial y superior libre de la bravura artificial de la época. Logró un nuevo modo romántico de expresión. Los lados más débiles de las composiciones para violín de Spohr se observan en sus estructuras rítmicas algo monótonas; en su rechazo de ciertos estilos picantes de arcos y armónicos artificiales; y en la carencia de texturas contrapuntísticas.

Spohr fue un destacado violinista e inventó la mentonera del violín alrededor de 1820. También fue un importante director de orquesta, ya que fue uno de los primeros en usar una batuta y también inventó las letras de ensayo, que se colocan periódicamente a lo largo de una partitura. para que un director pueda ahorrar tiempo pidiendo a la orquesta o a los cantantes que empiecen a tocar "desde la letra C", por ejemplo.

Además de las obras musicales, Spohr es recordado especialmente por su Violinschule (La escuela del violín), un tratado sobre la interpretación del violín que codificó muchos de los últimos avances en la técnica del violín, como el uso de picante. Se convirtió en una obra estándar de instrucción. Además, escribió una autobiografía entretenida e informativa, publicada póstumamente en 1860. Un museo está dedicado a su memoria en Kassel.

Según Rey M. Longyear, las mejores obras de Spohr fueron aclamadas por muchos de sus contemporáneos como esencialmente románticas y heredadas por Mendelssohn.

Grabaciones seleccionadas

Ópera

Nota: WoO = obra sin número de opus (ver también: Folker Göthel "Thematisch-Bibliographisches Verzeichnis der Werke von Louis Spohr". Tutzing, 1981).