Los Olvidados
Los Olvidados (pronunciado [los olβiˈðaðos], español: Los Olvidados conocidos en Estados Unidos como Los Olvidados; Los jóvenes y los condenados) es una película criminal adolescente mexicana de 1950 dirigida por Luis Buñuel. Fue filmado en Estudios Tepeyac y locaciones en la Ciudad de México.
El productor Óscar Dancigers buscó a Buñuel para dirigir tras el éxito de El Gran Calavera (1949). Buñuel ya tenía listo un guión titulado ¡Mi huerfanito jefe! sobre un niño que vende billetes de lotería. Sin embargo, Dancigers tenía en mente una descripción más realista y seria de los niños pobres en la Ciudad de México. Después de realizar una investigación, Jesús Camacho y Buñuel idearon un guión que agradó a Dancigers. La película se puede ver en la tradición del realismo social, aunque también contiene elementos del surrealismo presentes en gran parte de la obra de Buñuel.
Aunque fue ampliamente criticado en su estreno inicial, Los olvidados recibió el premio al Mejor Director en el Festival de Cine de Cannes de 1951. Ahora se considera un elemento básico del cine latinoamericano.
Trama
La película trata sobre un grupo de niños indigentes y sus desgracias en un barrio pobre de la Ciudad de México. El Jaibo escapa de la cárcel juvenil y se reencuentra con la pandilla callejera que lidera. Intentan robar a un músico callejero ciego y, al principio, fracasan, luego lo rastrean, lo golpean y destruyen sus instrumentos.
Con la ayuda de Pedro, El Jaibo localiza a Julián, el joven que supuestamente lo envió a la cárcel. El Jaibo pone su brazo ileso en cabestrillo, esconde una piedra en él y se enfrenta a Julián, quien niega haberlo denunciado a la policía y se niega a pelear con El Jaibo porque no sería una pelea justa. Cuando Julián comienza a alejarse, El Jaibo lo golpea con la piedra en la nuca. Luego golpea fuertemente a Julián con un palo y le quita el dinero, matándolo. El Jaibo advierte a Pedro que no denuncie el crimen y comparte el dinero de Julián con Pedro para convertirlo en cómplice.

La madre de Pedro resiente el comportamiento de su hijo y demuestra que no lo ama ni se preocupa por él. Pedro se entristece por esto, promete empezar a comportarse mejor y encuentra trabajo como aprendiz de herrero. Un día, El Jaibo viene a hablar con él sobre su secreto y, sin que Pedro lo sepa, roba un cuchillo de un cliente de la mesa del herrero. Pedro es acusado del crimen y enviado a un programa de rehabilitación juvenil, la "granja escuela", donde se pelea y mata dos gallinas. El director pone a prueba a Pedro entregándole un billete de 50 pesos para que haga recados. Pedro acepta y se marcha con la intención de completar los recados. Tan pronto como se va, se encuentra con El Jaibo, quien le roba el dinero. Molesto porque su intento de ser bueno fue frustrado nuevamente, Pedro localiza a El Jaibo y pelea con él. La pelea termina en un punto muerto, pero Pedro anuncia a la multitud que fue El Jaibo quien mató a Julián. El Jaibo huye, pero el ciego ha escuchado la acusación y se lo cuenta a la policía.
Pedro rastrea a El Jaibo una vez más para asesinarlo. El Jaibo mata a Pedro. Mientras huye, El Jaibo se encuentra con la policía y, cuando intenta huir, la policía le dispara y lo mata. Meche y su abuelo encuentran el cuerpo de Pedro en su cobertizo. No queriendo involucrarse, arrojan su cuerpo por un acantilado cubierto de basura. En el camino, pasan junto a la madre de Pedro, quien, aunque alguna vez no se preocupó por su hijo desobediente, ahora lo está buscando.
Final alternativo
En 2002, se anunció que se descubrió un final alternativo para Los Olvidados (etiquetado "el final feliz") en la Sala de Cine de la Universidad Nacional Autónoma de México, y sería restaurado digitalmente para poder mostrarlo al público. El 8 de julio de 2005, se volvió a proyectar con el final alternativo en algunos lugares seleccionados y se incluyó en lanzamientos de DVD posteriores.
En el Festival Internacional de Cine de Saltillo, Coahuila, México, el 3 de febrero de 2011, el último miembro superviviente del elenco, Alfonso Mejía (Pedro), presentó el final alternativo de la película.
El final alternativo comienza con El Jaibo y Pedro peleando en un almacén abandonado. Pedro empuja a El Jaibo desde el techo, donde cae y muere. Pedro registra el cuerpo por el dinero que El Jaibo le robó (en contraste con el final original, donde Pedro es asesinado por El Jaibo). Pedro regresa a la granja escuela con el dinero que le confió el director.
Reparto

- Stella Inda como madre de Pedro
- Miguel Inclán como Don Carmelo, el ciego
- Alfonso Mejía como Pedro
- Roberto Cobo como "El Jaibo" ("el cangrejo", un apodo para una persona de Tampico)
- Alma Delia Fuentes como Meche
- Francisco Jambrina como director de la escuela rural
- Jesús Navarro como el padre de Julián
- Efraín Arauz como "Cacarizo" ("pockmarked")
- Jorge Pérez como "Pelón" ("baldía")
- Javier Amézcua como Julián
- Mário Ramírez como "Ojitos" ("Ojos Pequeños"), el chico perdido
- Ernesto Alonso como Narrator (no acreditado)
Análisis
Temáticamente, Los Olvidados es similar a la anterior película española de Buñuel, Tierra sin pan. Ambas películas tratan sobre el ciclo interminable de pobreza y desesperación. Los Olvidados es especialmente interesante porque aunque "Buñuel empleó [...] elementos del neorrealismo italiano", un movimiento concurrente a través del Océano Atlántico marcado por "ubicaciones al aire libre, no profesionales actores, producciones de bajo presupuesto y un enfoque en las clases trabajadoras", Los Olvidados no es una película neorrealista (Fernández, 42). "La realidad neorrealista es incompleta, convencional y, sobre todo, racional", escribió Buñuel en un ensayo de 1953 titulado "Poesía y cine". "La poesía, el misterio, todo lo que completa y amplía la realidad tangible, falta por completo" (Sklar, 324). Los Olvidados contiene tomas tan surrealistas como cuando "un niño arroja un huevo a la lente de la cámara, donde se rompe y gotea" o una escena en la que un niño tiene un sueño en cámara lenta (Sklar, 324). La secuencia del sueño surrealista en realidad se rodó al revés y se cambió en posproducción. Buñuel no romantiza a los personajes, e incluso se revela que el ciego maltratado tiene hábitos crueles de aprovecharse de los niños y vender elixires falsos. El historiador de cine Carl J. Mora ha dicho de Los olvidados que el director “visualizó la pobreza de una manera radicalmente diferente a las formas tradicionales del melodrama mexicano. Los niños de la calle de Buñuel no están 'ennoblecidos' por su lucha desesperada por la supervivencia; de hecho, son depredadores despiadados que no son mejores que sus víctimas igualmente poco románticas.
Controversia sobre posible plagio
La periodista Verónica Calderón, en un artículo publicado el 14 de agosto de 2010 en el diario español El País, recoge declaraciones de Morelia Guerrero, hija del periodista y escritor mexicano Jesús R. Guerrero (Numarán, Michoacán, 1911-1979), en las que Morelia señala que el guión y la película están basados en una novela escrita por su padre, titulada Los Olvidados, publicada en 1944, con prólogo del escritor mexicano José Revueltas. El Instituto Politécnico Nacional de México (IPN) publicó, en diciembre de 2009, una segunda edición de la novela escrita por Jesús R. Guerrero. Sin embargo, se han realizado estudios comparativos entre la película y la novela, y no se ha encontrado rastro alguno de plagio por parte de Buñuel.
Recepción
Inicial

Los Olvidados fue en gran medida desatado por la prensa mexicana en su liberación. Juan Carlos Ibáñez y Manuel Palacio escriben: "La película fue tan dura e innovadora, tan crítica y atrevida en sus declaraciones que durante sus primeras proyecciones, los espectadores escucharon abiertamente su indignación hacia las características de la identidad mexicana presentada por Buñuel". El trabajo también fue criticado como demasiado sombrío.
Retrospectiva
Desde entonces, muchos críticos han proclamado Los Olvidados una obra maestra. Actualmente tiene una puntuación del 91% en el sitio web Rotten Tomatoes según 45 reseñas. Fue inscrito en la "Memoria del Mundo" de la UNESCO. Regístrese en 2003 en reconocimiento a su importancia histórica.
El trabajo ocupó el puesto 110 en el Sight & Sonidos críticos' Encuesta de las mejores películas jamás realizadas. En abril de 2019, se seleccionó una versión restaurada de la película para proyectarla en la sección Cannes Classics del Festival de Cine de Cannes de 2019.
La película ocupa el puesto número 2 en la lista de las 100 mejores películas mexicanas de todos los tiempos según 25 críticos de cine (1994/2020).
Influencia
Los Olvidados ha sido citado como una influencia en películas como Pixote (1980), Amores perros (2000) y Ciudad de Dios (2002).