La vida cotidiana

vida cotidiana, vida diaria o vida rutinaria comprende las formas en que las personas suelen actuar, pensar y sentir a diario. La vida cotidiana puede describirse como mundana, rutinaria, natural, habitual o normal.
La diurnaidad humana significa que la mayoría de las personas duermen al menos parte de la noche y están activas durante el día. La mayoría hace dos o tres comidas al día. El tiempo de trabajo (aparte del trabajo por turnos) implica principalmente un horario diario, que comienza por la mañana. Esto produce las horas punta diarias que experimentan muchos millones de personas y el tiempo de conducción en el que se centran las emisoras de radio. La noche suele ser tiempo libre. Bañarse todos los días es una costumbre para muchos.
Más allá de estas grandes similitudes, los estilos de vida varían y diferentes personas pasan sus días de manera diferente. Por ejemplo, la vida nómada difiere del sedentismo, y entre los sedentarios, la gente urbana vive de manera diferente a la rural. Las diferencias en las vidas de ricos y pobres, o entre trabajadores e intelectuales, pueden ir más allá de sus horas de trabajo. Los niños y los adultos también varían en lo que hacen cada día.
Perspectivas sociológicas

La vida cotidiana es un concepto clave en los estudios culturales y es un tema especializado en el campo de la sociología. Algunos argumentan que, motivados por los efectos degradantes del capitalismo y el industrialismo sobre la existencia y la percepción humanas, los escritores y artistas del siglo XIX se inclinaron más hacia la autorreflexión y hacia la representación de la vida cotidiana representada en sus escritos y arte en mayor medida. grado que en obras anteriores, por ejemplo, el interés de la literatura renacentista por la hagiografía y la política. Otros teóricos cuestionan este argumento basándose en una larga historia de escritos sobre la vida cotidiana que se pueden ver en obras de la Antigua Grecia, el cristianismo medieval y el Siglo de las Luces.
En el estudio de la vida cotidiana el género ha sido un factor importante en sus concepciones. Algunos teóricos consideran a las mujeres como representantes y víctimas por excelencia de la vida cotidiana.
La connotación de la vida cotidiana es a menudo negativa y se separa distintivamente de los momentos excepcionales por su falta de distinción y diferenciación, definida en última instancia como el continuo esencial y dado por sentado de la actividad mundana que describe las incursiones en experiencias más esotéricas. Es la realidad no negociable que existe entre todos los grupos sociales sin discriminación y es una base inevitable para la cual existe todo esfuerzo humano.
Gran parte de la vida cotidiana es automática en el sentido de que está impulsada por las características ambientales actuales mediadas por el procesamiento cognitivo automático de esas características, y sin ninguna mediación por elección consciente, según el psicólogo social John A. Bargh. Los sociólogos también estudian la vida cotidiana para investigar cómo se organiza y se le da significado. Una revista sociológica llamada Journal of Mundane Behavior, publicada entre 2000 y 2004, estudió estas acciones cotidianas.
Ocio
En el pasado, el entretenimiento diario consistía principalmente en contar historias por la noche. Esta costumbre se desarrolló en el teatro de la antigua Grecia y otros entretenimientos profesionales. Posteriormente, la lectura dejó de ser una especialidad misteriosa de los eruditos y se convirtió más en un placer común para las personas que podían permitirse el lujo de adquirir libros. Durante el siglo XX, los medios de comunicación se hicieron prevalentes en los países ricos, creando, entre otras cosas, un horario de máxima audiencia para consumir ficción y otras obras producidas profesionalmente.
Diferentes formas de medios sirven para diferentes propósitos en diferentes individuos. La vida cotidiana, que brinda a las personas la oportunidad de elegir qué medios de comunicación (ver televisión, usar Internet, escuchar la radio o leer periódicos o revistas) les ayuda de manera más eficaz a realizar sus tareas. Muchas personas han aumentado constantemente su uso diario de Internet, por encima de todos los demás medios de comunicación.
Idioma
La vida cotidiana de las personas se moldea a través del lenguaje y la comunicación. Eligen qué hacer con su tiempo basándose en opiniones e ideales formados a través del discurso al que están expuestos. Gran parte del diálogo al que está sujeta la gente proviene de los medios de comunicación, que son un factor importante que determina la experiencia humana. Los medios utilizan el lenguaje para generar un impacto en la vida cotidiana, ya sea tan pequeño como ayudar a decidir dónde comer o tan grande como elegir un representante en el gobierno.
Para mejorar la vida cotidiana de las personas, Phaedra Pezzullo, profesora del Departamento de Comunicación y Cultura de la Universidad de Indiana en Bloomington, dice que las personas deberían tratar de comprender la retórica que tan a menudo y de manera imperceptible cambia sus vidas. Ella escribe que "... la retórica nos permite hacer conexiones... Se trata de comprender cómo nos relacionamos con el mundo".
Actividades de la vida diaria
Actividades de la vida diaria (AVD) es un término utilizado en el ámbito sanitario para referirse a las actividades diarias de autocuidado dentro del lugar de residencia de un individuo, en entornos al aire libre o en ambos. Los profesionales de la salud se refieren habitualmente a la capacidad o incapacidad para realizar AVD como una medida del estado funcional de una persona, particularmente en lo que respecta a personas con discapacidad y personas mayores. Las AVD se definen como "las cosas que hacemos normalmente... como alimentarnos, bañarnos, vestirnos, arreglarnos, trabajar, hacer las tareas del hogar y descansar". La capacidad y el grado en que las personas mayores pueden realizar estas actividades son el centro de la gerontología y la comprensión de la vida posterior.