Karyenda
El karyenda es un tambor tradicional africano. Era el símbolo principal de Burundi y su Mwami (Rey) y tenía un estatus semidivino. Se decía que el Mwami interpretaba los golpes del karyenda en reglas para el reino.
Historia


Cuando Burundi obtuvo su independencia de Bélgica en 1962, la karyenda fue el símbolo de la bandera nacional y su escudo de armas de 1962 a 1966. Fue reemplazado después de que se estableció la república. Tradicionalmente, las canciones y danzas populares más importantes se interpretaban para ensalzar las virtudes de la realeza. Un festival importante era el umuganuro (festival del sorgo) anual, que era un gran despliegue de pompa, festividades y bailes para la corte real. Desde la caída de la monarquía en 1966, y particularmente después de la masacre de hutus en 1972, esas expresiones culturales han decaído.
El segundo tambor más importante era el rukinzo. Acompañó al mwami dondequiera que fuera.
Los tambores, a pesar de muchos cambios, han seguido siendo populares y todavía son venerados. Las antiguas familias guardianas de los tambores han tratado de mantener vivas las antiguas tradiciones. Algunos tienen proyección internacional, como los Royal Drummers of Burundi, o L. Ndoricimpa y C. Guillet, que grabaron Les tambours du Burundi (Los tambores de Burundi) en 1983.
Simbolismo
Como objetos sagrados, los tambores eran mucho más que simples instrumentos musicales. Se utilizaban en rituales, como el umuganuro, o para circunstancias especiales. Los tambores anunciaban los acontecimientos más importantes para el rey, como coronaciones reales, funerales y bodas. El redoble de los tambores también señalaba ciertos ritos, como cuando el mwami se levantaba por la mañana o se retiraba por la tarde.
Los tambores tenían varios nombres, como "dispensador de paz" o "señora de la tierra".
La Real Orden de Karyenda y la Real Orden de Rukinzo fueron fundadas por el rey Mwambutsa IV de Burundi el 1 de julio de 1962. La Orden de Karyanda era la orden principal del reino y estaba dividida en cinco clases.
Santuarios
Los tambores normalmente se guardaban en santuarios de tambores. Se trataba de una estrecha red de lugares altos, así como centros de poder político y religioso en el Burundi precolonial. Los santuarios estaban custodiados principalmente por familias hutus, que eran las únicas a las que el rey permitía fabricar, tocar y conservar los tambores o llevarlos a la corte para una ocasión. Se llamaban abatimbo, que en rundi significa bateristas "que golpean fuerte". En cada santuario se entronizaba un tambor sagrado y estaba custodiado por asistentes. También había ingendanyi (tambores menores) y un juego de tambores que se tocaban con los tambores principales.
Algunos de los principales santuarios de los tambores fueron: la colina Gishora, cerca de Gitega; Colina Higiro, también cerca de Gitega; Cerro Magamba; y Banga.