Fernando d´Ávalos

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mercenario italiano del siglo 15/16
Retrato de Fernando Francesco D'Ávalos, 1515-1520

Fernando Francesco d'Ávalos, quinto marqués de Pescara (o Ferrante Francesco d'Ávalos); Español: Francisco Fernando de Ávalos (11 de noviembre de 1489 – 3 de diciembre de 1525), fue un condottiero italiano de origen aragonés (español). Fue una figura importante de las guerras italianas: en la batalla de Rávena en 1512, fue hecho prisionero por los franceses pero fue liberado al concluir la Guerra de la Liga de Cambrai. Fue el comandante en jefe de los ejércitos Habsburgo de Carlos V en Italia durante las Guerras Habsburgo-Valois y derrotó a los franceses en Bicocca y Pavía.

Biografía

Fernando nació en Nápoles, pero su familia era de origen aragonés, habiendo llegado al sur de Italia con el general de Alfonso V, Iñigo d'Avalos, su abuelo. El padre de Fernando era Alfonso d'Ávalos d'Aquino, cuarto marqués de Pescara (no confundir con Alfonso d'Ávalos, sexto marqués de Pescara y primo de Fernando). A pesar de su lugar de nacimiento se consideraba español, hablaba español en todo momento, incluso con su esposa, y siempre estaba rodeado de soldados y oficiales españoles.

El padre de Farnando fue asesinado durante una invasión francesa de Nápoles, cuando el niño aún era un bebé en brazos. A la edad de seis años el niño se comprometió con Vittoria Colonna, hija del general Fabrizio Colonna, y el matrimonio se celebró en 1509 en la isla de Ischia. Su posición como noble del partido aragonés en Nápoles le obligaba a apoyar a Fernando el Católico en sus guerras italianas. En 1512, comandó un cuerpo de caballería ligera en la batalla de Rávena, donde fue herido y hecho prisionero por los franceses. Gracias a la intervención de uno de los generales franceses más destacados, el italiano G. G. Trivulzio, que era su pariente matrimonial, se le permitió pedir un rescate de 6.000 ducados.

Estuvo al mando de la infantería española en la batalla de La Motta, o Vicenza, el 7 de octubre de 1513. Fue en esta ocasión que llamó a sus hombres antes de la carga para que tuvieran cuidado de pisarlo antes de que lo hiciera el enemigo si cayó. Desde la batalla de Vicenza en 1513 hasta la batalla de Bicocca el 29 de abril de 1522, continuó sirviendo al mando de los españoles y como colega, más que como subordinado, de Prospero Colonna.

Después de la batalla de Bicocca, Carlos V nombró a Colonna comandante en jefe. D'Ávalos, que se consideró agraviado, hizo un viaje a Valladolid en España, donde se encontraba entonces el emperador, para exponer sus propios reclamos. Carlos V, con quien mantuvo largas y confidenciales entrevistas, lo persuadió a someterse por el momento a la superioridad de Colonna. Pero en estas reuniones se ganó la confianza de Carlos V. Su ascendencia española y sus simpatías lo distinguían como un comandante de las tropas imperiales en Italia más seguro que un comandante "pleno". El italiano podría haberlo sido.

Fernando Francesco D'Ávalos

Cuando Francisco I invadió Italia en 1524 d'Ávalos fue nombrado lugarteniente del emperador para repeler la invasión. Las dificultades de su posición eran muy grandes, pues había mucho descontento en el ejército, que estaba muy mal pagado. El tesón, la paciencia y el tacto de d'Ávalos triunfaron sobre todos los obstáculos. Su influencia sobre las tropas españolas veteranas y los mercenarios alemanes los mantuvo leales durante el largo asedio de Pavía.

El 24 de febrero de 1525, derrotó y hizo prisionero a Francisco I mediante un brillante ataque. D'Ávalos' El plan fue notable por su audacia y por la habilidad que demostró al destruir a la superior caballería pesada francesa atacándola por el flanco con una fuerza mixta de arcabuceros y caballos ligeros. Se creía que no estaba satisfecho con el trato que había recibido del emperador, y Girolamo Morone, secretario de Francisco II Sforza, duque de Milán, se le acercó con un plan para expulsar de Italia a franceses, españoles y alemanes por igual, y ganar un trono para sí mismo. Puede que Dávalos haya escuchado al tentador, pero en el acto fue leal. Informó de la oferta a Carlos V y encarceló a Morone. Su salud, sin embargo, había comenzado a deteriorarse debido a la tensión de las heridas y la exposición a finales de noviembre, y murió en Milán el 3 de diciembre de 1525.

Familia

D'Ávalos no tuvo hijos; su título recayó en su primo Alfonso d'Ávalos, marqués de Vasto, también un distinguido general imperial (que de hecho dirigió a los mosqueteros imperiales en Pavía).

En literatura

El historiógrafo italiano Paolo Giovio publicó una biografía contemporánea en latín de Fernando Francesco que fue incluida en su Vitae (illustrium virorum). Posteriormente fue traducida por Lodovico Domenichi y publicada en Florencia en 1551. La biografía de Giovio también fue traducida al español por Pedro de Vallés en 1553 como Historia del fortissimo y prudentissimo capitan Don Hernando de Ávalos.

La novela Die Versuchung des Pescara de Conrad Ferdinand Meyer trata sobre él.

La duquesa de Malfi de John Webster, representada por primera vez en 1613-1614, hace numerosas referencias a El marqués.