El poder de la computadora y la razón humana
Poder informático y razón humana: del juicio al cálculo (1976) de Joseph Weizenbaum muestra la ambivalencia del autor hacia la tecnología informática y expone el caso de que Si bien la inteligencia artificial puede ser posible, nunca debemos permitir que las computadoras tomen decisiones importantes porque las computadoras siempre carecerán de cualidades humanas como la compasión y la sabiduría.
Weizenbaum hace la distinción crucial entre decidir y elegir. Decidir es una actividad computacional, algo que en última instancia puede programarse. Es la capacidad de elegir lo que, en última instancia, convierte a uno en un ser humano. La elección, sin embargo, es producto del juicio, no del cálculo. El juicio humano integral es capaz de incluir factores no matemáticos como las emociones. El juicio puede comparar manzanas y naranjas, y puede hacerlo sin cuantificar cada tipo de fruta y luego cuantificar reductivamente cada una de ellas en factores necesarios para la comparación matemática.
El libro provocó desacuerdo y separación de otros miembros de la comunidad de investigación de inteligencia artificial, un estatus del que el autor dijo más tarde que se enorgullecía.