Dinamismo

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Dinamismo es un nombre general para un grupo de puntos de vista filosóficos sobre la naturaleza de la materia. Por muy diferentes que puedan ser en otros aspectos, todos estos puntos de vista concuerdan en hacer que la materia consista esencialmente en unidades, sustancias o fuerzas simples e indivisibles. El dinamismo se usa a veces para denotar sistemas que admiten no solo materia y extensión, sino también determinaciones, tendencias y fuerzas intrínsecas y esenciales a la materia. Sin embargo, más propiamente significa sistemas exclusivos que eliminan el dualismo de materia y fuerza al reducir la primera a la segunda.

Formulación de Leibniz

El dinamismo es la metafísica de Gottfried Leibniz (1646-1716) que reconcilia la teoría de la sustancia hilomórfica con el atomismo mecanicista a través de una armonía preestablecida, y que luego fue desarrollada por Christian Wolff (1679-1754) como una cosmología metafísica. La tesis principal de Leibniz sigue como consecuencia de su mónada, que: “la naturaleza de cada sustancia lleva una expresión general de todo el universo. [La mónada proporciona] el concepto de una sustancia individual que contiene... todos sus fenómenos, de modo que nada puede sucederle a la sustancia que no se genere a partir de su propio fundamento... sino en conformidad con lo que le sucede a otra”... Por lo que Leibniz "contrarresta la tendencia inherente en el racionalismo cartesiano y spinozista hacia una interpretación 'aislacionista' de la independencia ontológica de la sustancia... La descripción de Leibniz de la fuerza sustancial tiene como objetivo proporcionar la base metafísica completa para una ciencia de la dinámica".

En el párrafo inicial de Specimen dynamicum (1692), Leibniz comienza aclarando su intención de reemplazar la explicación cartesiana de la sustancia corpórea afirmando la prioridad de la fuerza sobre la extensión... Esto le permite afirmar que el principio aristotélico de la forma es necesario para la explicación filosófica de la naturaleza. Lo hace en vista de cuatro facetas principales de su doctrina de la fuerza: (1) la caracterización de la fuerza (vis naturae) como aquello que es constitutivo de la sustancia misma; (2) la preocupación por distinguir claramente este concepto de fuerza de la noción escolástica de potentia; (3) la interpretación correlativa de la fuerza en términos de conatus o nisus, es decir, como algo entre la mera potencia y el acto completo; y (4) la afirmación de la corrección fundamental del propio concepto de forma de Aristóteles como entelequia, y el correspondiente intento de Leibniz de hacer este concepto completamente inteligible.

Al reemplazar el concepto cartesiano de sustancia corpórea y defender el principio aristotélico de la forma, Leibniz prepara el escenario para una interpretación del ser material en términos diferentes de los de la materia inerte y el movimiento comunicado externamente. Leibniz conserva así lo que considera el núcleo racional de la concepción aristotélica de la sustancia. En efecto, la teoría de la fuerza de Leibniz implica la rehabilitación y reconstrucción del compuesto materia-forma como el concepto central de la metafísica de la naturaleza corpórea. La preocupación de Leibniz por revivir el esquema explicativo aristotélico mediante el concepto de fuerza sustancial subyace a su descripción de los rasgos estructurales y materiales de la agregación de mónadas y la interacción corpórea.

El análisis de la fuerza activa primitiva (vis activa primitiva) produce el principio metafísico fundamental de que la sustancia perdura a través de todos los procesos de interacción corpórea manifestada fenoménicamente [y] la base de la identidad de cualquier cuerpo particular a través de las alteraciones que sufre como resultado de su interacciones con otros cuerpos. También prevé la continuidad y conservación de la acción dentro de la naturaleza corpórea como un todo. La fuerza pasiva primitiva (vis passiva primitiva) es la base de la extensión corpórea, por la cual un cuerpo aparece como masa material [y capacidad] para resistir cambios en su estado de movimiento y para impedir la penetración de otros cuerpos... Fuerza activa derivada (vis activa derivativa) resulta de la modificación o limitación de la fuerza primitiva... que toma la forma del conflicto fenoménicamente manifestado de los cuerpos físicos... sujetos a distribución en virtud de este conflicto. Por lo tanto, no perdura en ningún cuerpo individual durante el curso de su interacción con otras sustancias corporales. Ya que es comprensible como la acción interna [cuando] actúa sobre algún otro cuerpo o cuerpos, [con] la capacidad de resistir... la penetración y los cambios en sus estados de movimiento. La fuerza pasiva derivada (vis passiva derivativa) es la modificación puramente cuantitativa de la fuerza pasiva primitiva [conocida] en términos de las medidas de la resistencia de cualquier masa material a la penetración y al cambio en su estado de movimiento.

Leibniz insiste en que la fuerza primitiva pertenece únicamente a causas completamente generales. Como principio estrictamente metafísico, es objeto de aprehensión puramente racional. Por lo tanto, no está vinculado inmediatamente a las leyes reales de interacción corporal en el reino fenoménico. Por otro lado, la fuerza derivada pertenece directamente a tal interacción observable. Su análisis conduce a la formulación sistemática de las leyes fundamentales de la dinámica corporal. Estas son leyes de acción que se conocen no solo por la razón, sino que también se prueban por la evidencia de los sentidos.-  Jeffrey Edwards, "El dinamismo aristotélico de Leibniz y la idea de una transición de la metafísica a la naturaleza corpórea" en Sustancia, fuerza y ​​la posibilidad del conocimiento: sobre la filosofía de la naturaleza material de Kant

Siglo XX y uso contemporáneo.

Se pueden encontrar elementos de dinamismo en las obras de Henri Bergson y en obras más contemporáneas, como la filosofía del proceso de Alfred North Whitehead en términos de relaciones, así como la teoría de sistemas de Ludwig von Bertalanffy y William Ross Ashby. El filósofo vasco Xavier Zubiri, sobre todo en sus obras "Sobre la esencia" y "Estructura dinámica de la realidad", detalla varios dinamismos inherentes al universo, comenzando con la variación, luego con la alteración, la individualidad, el autodominio, la convivencia, sobre el Dinamismo como Modo de Ser-en-el-mundo. Es una respuesta a la Filosofía del Espíritu vía Hegel además de reduccionistas y Heidegger. Este concepto también tiene resonancias con la ontología orientada a objetos y las escuelas de filosofía del realismo especulativo.