Democracia de base
La democracia de base es una tendencia hacia el diseño de procesos políticos que transfieren tanta autoridad de toma de decisiones como sea posible al nivel geográfico o social de organización más bajo de la organización.
Las organizaciones de base pueden tener una variedad de estructuras; dependiendo del tipo de organización y de lo que quieran los miembros. Estas pueden ser organizaciones no estructuradas y no jerárquicas dirigidas por todos los miembros, o por cualquier miembro que desee hacer algo.
Para citar un ejemplo hipotético específico, una organización de base nacional colocaría todo el poder de toma de decisiones posible en manos de capítulos locales o miembros comunes en lugar de la oficina central. El principio es que para que el poder democrático se ejerza mejor, debe recaer en una comunidad local y miembros comunes y en lugar de individuos aislados y atomizados, en la parte superior de la organización. Las organizaciones de base pueden habitar sistemas participativos. Los sistemas de base difieren de los sistemas representativos que permiten que las comunidades locales o los miembros nacionales elijan representantes que luego pasan a tomar decisiones.
La diferencia entre los tres sistemas radica en que descansan sobre dos ejes diferentes: el arraigo en una comunidad (de base versus nacional o internacional); y la capacidad de todos los individuos para participar en el proceso de toma de decisiones compartido (participativo versus representativo).
Contenido relacionado
Alternancia política
Tribalismo
Corporativismo cristiano