Carlos menem

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Presidente de la Argentina de 1989 a 1999

Carlos Saúl Menem ()pronunciación española:[picka] [me.nem] ()escucha); 2 de julio de 1930 – 14 de febrero de 2021) fue un abogado y político argentino que sirvió como Presidente de la Argentina de 1989 a 1999. Ideológicamente, identificó como un peronista y apoyó políticas económicamente liberales. Dirigió a Argentina como presidente durante el decenio de 1990 e implementó una liberalización del mercado libre. Sirvió como Presidente del Partido Justicialista durante trece años (de 1990 a 2001 y de nuevo de 2001 a 2003), y su enfoque político se convirtió en conocido como Peronismo Federal.

Nacido en Anillaco en el seno de una familia siria, Menem se crió como musulmán, pero luego se convirtió al catolicismo romano para seguir una carrera política. Menem se hizo peronista durante una visita a Buenos Aires. Dirigió el partido en su provincia natal de La Rioja y fue elegido gobernador en 1973. Fue depuesto y detenido durante el golpe de estado argentino de 1976 y fue elegido gobernador nuevamente en 1983. Derrotó al gobernador de Buenos Aires Antonio Cafiero en las elecciones primarias para las elecciones presidenciales de 1989. La hiperinflación y los disturbios obligaron al presidente saliente Raúl Alfonsín a renunciar anticipadamente, acortando la transición presidencial.

Menem apoyó el Consenso de Washington y abordó la inflación con el plan de Convertibilidad en 1991. El plan se complementó con una serie de privatizaciones y fue inicialmente un éxito. Argentina restableció relaciones diplomáticas con el Reino Unido, suspendidas desde la Guerra de las Malvinas de 1982, y desarrolló relaciones especiales con Estados Unidos. El país sufrió dos ataques terroristas. La victoria peronista en las elecciones intermedias de 1993 le permitió persuadir a Alfonsín (entonces líder del partido opositor UCR) para que firmara el Pacto de Olivos para la reforma de la Constitución argentina de 1994. Esta enmienda permitió a Menem postularse a la reelección en 1995, la cual ganó. Comenzó una nueva crisis económica y los partidos opuestos formaron una coalición política que ganó las elecciones intermedias de 1997 y las elecciones presidenciales de 1999.

Fue investigado por varios cargos penales y de corrupción, entre ellos tráfico ilegal de armas (fue condenado a siete años de prisión), malversación de caudales públicos (fue condenado a cuatro años y medio de prisión), extorsión y cohecho (en ambos del cual fue declarado inocente). Su posición como senador le valió inmunidad de encarcelamiento.

Menem se postuló nuevamente para la presidencia en 2003, pero frente a una posible derrota en un balotaje contra Néstor Kirchner, optó por retirarse, entregando efectivamente la presidencia a Kirchner. Fue elegido senador por La Rioja en 2005. Cuando murió en 2021 a los 90 años, era el expresidente argentino vivo de mayor edad. Se le considera una figura polarizadora en Argentina, principalmente debido a la corrupción y la mala gestión económica durante su presidencia.

Vida temprana y educación

Carlos Saúl Menem nació el 2 de julio de 1930 en Anillaco, un pequeño pueblo en el norte montañoso de la provincia de La Rioja, Argentina. Sus padres, Saúl Menem y Mohibe Akil, eran ciudadanos sirios de Yabroud que habían emigrado a Argentina. Cursó sus estudios primarios y secundarios en La Rioja, y durante sus estudios universitarios integró un equipo de baloncesto. Visitó Buenos Aires en 1951 con el equipo y conoció al presidente Juan Perón y su esposa Eva Perón. Esto influenció a Menem para convertirse en peronista. Estudió derecho en la Universidad Nacional de Córdoba, egresando en 1955.

Después del derrocamiento del presidente Juan Perón en 1955, Menem estuvo brevemente encarcelado. Más tarde se unió al sucesor del Partido Peronista, el Partido Justicialista (Partido Justicialista) (PJ). Fue elegido presidente de su cabildo provincial de La Rioja en 1973. Como tal, fue incluido en la huida a España que trajo a Perón de regreso a la Argentina después de su largo exilio. Según el político peronista Juan Manuel Abal Medina, Menem no jugó un papel especial en el evento.

Gobernadora de la Rioja

(feminine)

1er mandato (1973–1976) y arresto

Carlos Menem (derecha) se reúne con el presidente electo Héctor Cámpora en 1973.

Menem fue elegido gobernador de La Rioja en 1973 cuando se levantó la proscripción del peronismo. Fue depuesto durante el golpe de estado argentino de 1976 que derrocó a la presidenta Isabel Perón. Fue acusado de corrupción y de tener vínculos con la guerrilla de la Guerra Sucia. Fue detenido el 25 de marzo, recluido durante una semana en un cuartel local y luego trasladado a una prisión temporal en el barco 33 Orientales en Buenos Aires. Fue detenido junto a los exministros Antonio Cafiero, Jorge Taiana, Miguel Unamuno, José Deheza y Pedro Arrighi, los sindicalistas Jorge Triaca, Diego Ibáñez y Lorenzo Miguel, el diplomático Jorge Vázquez, el periodista Osvaldo Papaleo y el expresidente Raúl Lastiri.. Compartió celda con Pedro Eladio Vázquez, médico personal de Juan Perón. Durante este tiempo ayudó al capellán Lorenzo Lavalle, a pesar de ser aún musulmán. En julio lo enviaron a Magdalena, a prisión permanente. Su esposa Zulema lo visitaba todas las semanas, pero rechazó su conversión al catolicismo romano. Su madre murió durante el tiempo que estuvo preso, y el dictador Jorge Rafael Videla negó su solicitud para asistir a su funeral. Fue puesto en libertad el 29 de julio de 1978, con la condición de que viviera en una ciudad fuera de su provincia natal sin salir de ella. Se instaló en Mar del Plata. Menem conoció al almirante Eduardo Massera, quien pretendía postularse a la presidencia, y sostuvo encuentros públicos con personalidades como Carlos Monzón, Susana Giménez y Alberto Olmedo. Como resultado, se vio obligado a residir en otra ciudad, Tandil. Tenía que reportarse diariamente al Jefe de Policía Hugo Zamora. Esta residencia forzosa se levantó en febrero de 1980. Regresó a Buenos Aires y luego a La Rioja. Reanudó sus actividades políticas, a pesar de la prohibición, y fue detenido nuevamente. Su nueva residencia forzosa fue en Las Lomitas en la provincia de Formosa. Fue uno de los últimos políticos en salir de prisión por el Proceso de Reorganización Nacional.

Segundo y tercer trimestre (1983–1989)

El gobierno militar terminó en 1983 y el radical Raúl Alfonsín fue elegido presidente. Menem volvió a postularse para gobernador y fue elegido por un claro margen. La provincia se benefició de las regulaciones fiscales establecidas por los militares, lo que permitió un mayor crecimiento industrial. Su partido obtuvo el control de la legislatura provincial y fue reelegido en 1987 con el 63% de los votos. El Partido Justicialista en ese momento estaba dividido en dos facciones, los conservadores que aún apoyaban las doctrinas políticas de Juan e Isabel Perón, y los que proponían una renovación del partido. Las disputas internas cesaron en 1987. Menem, con su destacada victoria en su distrito, fue una de las figuras cimeras del partido y disputó su liderazgo.

Elecciones presidenciales

Carlos Menem y presidente saliente Raúl Alfonsín, durante la transición presidencial.

Antonio Cafiero, quien había sido electo gobernador de la provincia de Buenos Aires, lideró la renovación del Partido Justicialista y fue considerado su candidato más probable a la presidencia. Menem, por otro lado, fue visto como un líder populista. Usando un enfoque de gran carpa, obtuvo el apoyo de varias figuras políticas no relacionadas. Como resultado, derrotó a Cafiero en las elecciones primarias. Buscó alianzas con Bunge y Born, dirigentes gremiales, exmiembros de Montoneros, de la AAA, gente de la iglesia, "Carapintadas", etc. Prometió una "revolución de la producción" y enormes aumentos salariales, pero no estaba claro exactamente qué políticas proponía. El candidato rival, Eduardo Angeloz, trató de señalar los errores de Menem y Alfonsín. Jacques de Mahieu, un ideólogo francés del movimiento peronista (y excolaborador de Vichy), fue fotografiado haciendo campaña por Menem. Sus lemas de campaña fueron ¡Siganme! (¡Sígueme!) y ¡No los voy a defraudar! (¡No te defraudaré!)

Las elecciones se realizaron el 14 de mayo de 1989. Menem ganó por un amplio margen y se convirtió en el presidente electo de Argentina. Estaba previsto que asumiera el cargo el 10 de diciembre, pero los niveles de inflación empeoraron, convirtiéndose en hiperinflación y provocando disturbios públicos. El presidente saliente Alfonsín renunció y transfirió el poder a Menem cinco meses antes, el 8 de julio. La llegada al poder de Menem marcó la primera vez desde que Hipólito Yrigoyen asumió el cargo en 1916 que un presidente en ejercicio transfirió pacíficamente el poder a un sucesor electo de la oposición.

Presidencia

"La primera presidencia de Carlos Menem marcó el fin de un período lleno de incertidumbres, durante el cual las sucesivas administraciones nacionales de facto o constitucionales no habían tratado de ordenar la economía, frenar la emisión monetaria y desmantelar el poderoso aparato estatal armado en la década de 1940 durante la presidencia de Juan Perón y más ampliada por sus sucesores. Menem corregido drásticamente, con intuición precisa y un pulso firme, la tendencia equivocada a incluir entre las funciones del Estado una serie de actividades empresariales, industriales y comerciales que no tenían nada que ver con su misión esencial. Los resultados de su política económica se reflejaron en una entrada anticipada al mundo globalizado que se construyó después de la caída del Muro de Berlín, en una rápida modernización de la infraestructura productiva del país, y la estabilidad, que es la base del crecimiento a largo plazo. Desafortunadamente, el impulso reformista de Menem colapsó cuando su segundo gobierno comenzó. Su programa de transformación estructural del país fue interrumpido y no se ejecutaron muchos cambios estratégicos esenciales para las reformas del período anterior para producir los resultados esperados".

Editorial del periódico La Nación.

Política económica

Suscripciones telefónicas fijas por cada 100 personas entre 1975 y 1999. La línea naranja indica la privatización del ENTel.

La hiperinflación obligó a Menem a abandonar la ortodoxia partidaria en favor de una política económica fiscalmente conservadora y orientada al mercado. En ese momento, la mayoría de los economistas pensaban que la solución ideal era el Consenso de Washington; es decir, reducir los gastos por debajo de la cantidad de dinero que gana el estado y abrir el comercio internacional al libre comercio. Alfonsín había propuesto reformas similares en el pasado, junto con algunas privatizaciones limitadas de empresas estatales; esos proyectos fueron resistidos por el partido de oposición Partido Justicialista, cuyas facciones internas en realidad se estaban beneficiando de las políticas proteccionistas imperantes.

La magnitud de la crisis, sin embargo, convenció a la mayoría de los políticos a cambiar de opinión. Menem, temiendo que la crisis lo obligara también a renunciar, abrazó el Consenso de Washington y rechazó las políticas tradicionales del peronismo.

El presidente invitó a su gabinete a varias figuras conservadoras, como Álvaro Alsogaray, además de un empresario de Bunge y Born; Miguel Roig, el entonces vicepresidente de la empresa, se convirtió el 30 de mayo en el primer ministro de Economía designado por Menem, aunque sería reemplazado apenas cinco días después de asumir el cargo debido a su repentina muerte por infarto de miocardio; en su lugar se nombró a Néstor Mario Rapanelli, quien había sucedido a Roig como vicepresidente de Bunge y Born.

El Congreso aprobó las leyes de emergencia económica y reforma del estado. La primera permitía al presidente Menem reducir o eliminar los subsidios a su discreción, y la segunda privatizar empresas estatales, siendo las primeras teléfonos y aerolíneas. Estas privatizaciones beneficiaron a los acreedores extranjeros, quienes reemplazaron sus bonos por acciones de la empresa. A pesar del aumento de los ingresos fiscales y el dinero obtenido de las privatizaciones, la economía seguía siendo inestable. Los empresarios Bunge y Born dejaron el gobierno a fines de 1989, en medio de una segunda ronda de hiperinflación.

La primera medida del nuevo ministro de Economía, Antonio Erman González, fue la conversión obligatoria de los depósitos a plazo en bonos del Estado: el plan BOEX. Exacerbó la recesión pero logró reducir la tasa de inflación, que era su propósito. González también redujo el gasto en bienestar social, incluido el de las personas con discapacidad.

Su cuarto ministro de Economía, Domingo Cavallo, fue nombrado en 1991 y profundizó la liberalización de la economía. El plan de Convertibilidad fue sancionado por el Congreso, estableciendo un tipo de cambio fijo uno a uno entre el dólar estadounidense y el nuevo peso, que reemplazó al austral. La ley también limitó los gastos públicos, pero esto fue frecuentemente ignorado. Bajo Cavallo, hubo un aumento del libre comercio, junto con una reducción general de los aranceles a las importaciones y regulaciones estatales para enfrentar la inflación, y altos impuestos sobre las ventas y las ganancias para reducir el déficit causado por ella. Inicialmente, el plan fue un éxito: terminó la fuga de capitales, se redujeron las tasas de interés, la inflación cayó a un dígito y aumentó la actividad económica; solo en ese año, el producto interno bruto creció a una tasa del 10,5%.

El dinero de las privatizaciones permitió a Argentina recomprar muchos de los bonos Brady emitidos durante la crisis. Las privatizaciones de los servicios de electricidad, agua y gas fueron más exitosas que las anteriores. YPF, la refinería nacional de petróleo, también fue privatizada parcialmente y el Estado se quedó con una buena parte de sus acciones. El proyecto de privatización de los fondos de pensiones encontró resistencia en el Congreso y fue aprobado como un sistema mixto que permitía opciones tanto públicas como privadas para los trabajadores. El Estado nacional también firmó un pacto fiscal con las provincias, para que éstas también redujeran sus déficits locales; La provincia de Buenos Aires fue ayudada con un fondo que entregaba al gobernador un millón de pesos diarios.

Exportaciones relacionadas con automóviles (1983–2003) en millones de dólares. Durante el decenio de 1990, la Argentina experimentó un crecimiento de los ingresos de exportación de vehículos.

Si bien el plan de Convertibilidad tuvo consecuencias positivas en el corto plazo, generó problemas que surgieron más tarde. Se despidió a un gran número de empleados de empresas estatales privatizadas y el desempleo aumentó a más del 10%. Los grandes pagos de compensación impidieron una reacción pública inmediata. El libre comercio y los elevados costos en dólares obligaron a las empresas privadas a reducir también el número de trabajadores o arriesgarse a la quiebra. Los sindicatos no pudieron resistir los cambios. Las personas de bajos ingresos, como los jubilados y los trabajadores estatales, sufrieron aumentos de impuestos mientras sus salarios permanecieron congelados. Algunas provincias, como Santiago del Estero, Jujuy y San Juan, también sufrieron violentos disturbios. Para compensar estos problemas, el gobierno inició una serie de programas de bienestar social y restauró las políticas proteccionistas en algunos sectores de la economía. A las empresas argentinas les resultaba difícil exportar y las importaciones fáciles perjudicaban a la mayoría de los productores nacionales. El presupuesto nacional pronto se deslizó en un déficit.

Cavallo pronto comenzó la segunda ola de privatizaciones, esta vez dirigida al servicio postal nacional, el Correo Argentino y las plantas de energía nuclear del país. También limitó la cantidad de dinero entregado a las provincias. Todavía contaba con el pleno apoyo de Menem, a pesar de la creciente oposición dentro del Partido Justicialista.

La Crisis del Tequila Mexicano de 1994 impactó la economía nacional, provocando déficit, recesión y aumento del desempleo. El gobierno redujo aún más los gastos públicos, los salarios de los trabajadores estatales y aumentó los impuestos. El déficit y la recesión se redujeron, pero el desempleo se mantuvo alto. La deuda externa aumentó. La crisis también demostró que el sistema económico era vulnerable a la fuga de capitales.

El creciente descontento por el desempleo y los escándalos provocados por la privatización del servicio postal provocaron la destitución de Cavallo como ministro y su sustitución por Roque Fernández. Fernández mantuvo la austeridad fiscal de Cavallo; aumentó el precio de los combustibles, vendió las acciones estatales restantes de YPF a Repsol, despidió a los empleados estatales y elevó el impuesto al valor agregado al 21%. La nueva ley laboral encontró resistencia, tanto por parte de los peronistas, los partidos de oposición y los sindicatos, y no pudo ser aprobada por el Congreso.

La crisis financiera asiática de 1997 y la crisis financiera rusa de 1998 también afectaron al país con consecuencias que duraron más que la Crisis del Tequila e iniciaron una depresión.

Política interna

El Presidente Menem en un discurso de 1992 en el que se esbozan sus planes para la reforma del sistema educativo nacional, así como para la privatización de la preocupación petrolera del YPF, y del sistema de pensiones.

Menem comenzó su presidencia asumiendo un enfoque de no confrontación, nombrando a personas de la oposición conservadora y empresarios para su gabinete. Para evitar que los casos legales exitosos contra las privatizaciones proyectadas, el número de jueces de la Corte Suprema se incrementó de cinco a nueve; los nuevos jueces fallaron a favor de Menem y generalmente tenían la mayoría. También se controlaron otras instituciones que restringían o limitaban el poder ejecutivo. Cuando el Congreso resistió algunas de sus propuestas, utilizó el Decreto de Necesidad y Urgencia como alternativa al envío de proyectos de ley. Incluso consideró factible disolver el Congreso y gobernar por decreto, pero este paso nunca se llevó a cabo. Además, desarrolló un estilo de vida bon vivant, aprovechando su autoridad. Por ejemplo, hizo un viaje de Buenos Aires a Pinamar manejando un Ferrari Testarossa en menos de dos horas, violando los límites de velocidad. Se divorció de su esposa Zulema Yoma y amplió la residencia presidencial Quinta de Olivos con un campo de golf, un pequeño zoológico, sirvientes, una barbería y hasta un bufón.

Carlos Menem y Zine El Abidine Ben Ali (1997).

El escándalo de Swiftgate estalló en 1990, cuando los inversores estadounidenses se vieron perjudicados por un caso de corrupción y pidieron ayuda a los Estados Unidos. Embajador Terence Todman. La mayoría de los ministros dimitieron como consecuencia de ello. Cavallo fue reasignado como ministro de Economía y su exitoso plan económico lo convirtió en una figura destacada en el gabinete de Menem. Cavallo incorporó al gabinete a varios economistas independientes y Menem lo apoyó reemplazando a los políticos peronistas. Ambos equipos se complementaron. Tanto Menem como Cavallo intentaron ser reconocidos como artífices del plan de convertibilidad.

Antonio Cafiero, rival de Menem en el Partido Justicialista, no pudo enmendar la constitución de la provincia de Buenos Aires para postularse a la reelección. Duhalde renunció a la vicepresidencia y se convirtió en el nuevo gobernador en las elecciones de 1991, convirtiendo a la provincia en un poderoso bastión. Menem también seleccionó a personajes célebres sin antecedentes políticos para postularse en esas elecciones, entre ellos el cantante Palito Ortega y el piloto de carreras Carlos Reutemann. Las elecciones fueron un gran éxito para el Partido Justicialista. Luego de estas elecciones, todo el Partido Justicialista se alineó con el liderazgo de Menem, con la excepción de un pequeño número de legisladores conocido como el 'Grupo de los Ocho'. La oposición de la UCR fue mínima, ya que el partido aún estaba desacreditado por la crisis de 1989. Con tal influencia política, Menem inició su propuesta de reformar la constitución para permitir la reelección. El partido no tenía la mayoría calificada requerida en el Congreso para pedirlo. El Partido Justicialista estaba dividido, ya que otros políticos pretendían reemplazar a Menem en 1995 o negociar su apoyo. La UCR también estaba dividida, ya que Alfonsín se opuso a la propuesta, pero los gobernadores Angeloz y Massaccesi estaban abiertos a negociar. La victoria en las elecciones de 1993 fortaleció su propuesta, que fue aprobada por el Senado. Menem convocó a un referéndum no vinculante sobre la propuesta, para aumentar la presión sobre los diputados radicales. También envió un proyecto de ley al Congreso para modificar los requisitos de mayoría. Alfonsín se reunió con Menem y acordó apoyar la propuesta a cambio de enmiendas que pondrían límites al poder presidencial. Esta negociación se conoce como el Pacto de Olivos. La ciudad capital de Buenos Aires podría elegir a su propio jefe de gobierno. Las elecciones presidenciales usarían un sistema de votación y el presidente solo podría ser reelegido una vez. El colegio electoral fue abolido, reemplazado por elecciones directas. Se permitiría a las provincias elegir un tercer senador; dos para el partido mayoritario y uno para el primero minoritario. El Consejo de la Magistratura de la Nación tendría la facultad de proponer nuevos jueces, y los Decretos de Necesidad y Urgencia tendrían un alcance reducido.

A pesar de la oposición interna de Fernando de la Rúa, Alfonsín consiguió que su partido aprobara el pacto. Razonó que Menem sería apoyado por el eventual referéndum, que muchos legisladores se pondrían de su lado y eventualmente podría enmendar la constitución reforzando el poder presidencial en lugar de limitarlo. Aun así, como ambas partes temían una traición, todos los contenidos del pacto se incluyeron como una sola propuesta, impidiendo que la Asamblea Constituyente discutiera cada uno por separado. El Frente Amplio, un nuevo partido político integrado por ex peronistas, encabezado por Carlos Álvarez, creció en las elecciones a la Asamblea Constituyente. Tanto el Partido Justicialista como la UCR respetaron el pacto, el cual fue aprobado en su totalidad. Duhalde hizo una reforma similar a la constitución de la provincia de Buenos Aires, para ser reelecto en 1995. Menem ganó las elecciones con más del 50% de los votos, seguido por José Octavio Bordón y Carlos Álvarez. La UCR terminó tercera en las elecciones por primera vez.

Menem, en la campaña de 1999.

El creciente desempleo incrementó la resistencia popular contra Menem tras su reelección. Hubo varios motines y manifestaciones en las provincias, los sindicatos se opusieron a las políticas económicas y los partidos opositores organizaron los primeros cacerolazos. Estanislao Esteban Karlic reemplazó a Antonio Quarracino al frente de la Conferencia Episcopal Argentina, lo que provocó una creciente oposición a Menem por parte de la Iglesia. Los profesores' los sindicatos establecieron una "carpa blanca" en la plaza del Congreso como forma de protesta. Los primeros piqueteros operaron en Cutral Có, y este método de protesta pronto fue imitado en el resto del país. La autoridad de Menem en el Partido Justicialista también se puso en duda, ya que no pudo postularse para otra reelección y el partido buscó un candidato para las elecciones de 1999. Esto llevó a una feroz rivalidad con Duhalde, el candidato más probable. Menem intentó socavar sus posibilidades y propuso una nueva enmienda a la constitución que le permitiera postularse para un número ilimitado de reelecciones. También inició un caso judicial, alegando que su incapacidad para postularse para un tercer mandato era una proscripción. Surgieron varios escándalos, como el escándalo por la venta de armas argentinas a Ecuador y Croacia, la explosión de Río Tercero que pudo haber destruido pruebas, el asesinato del periodista José Luis Cabezas y el suicidio de Alfredo Yabrán, quien pudo haberlo ordenado. El Partido Justicialista, perdió las elecciones intermedias de 1997 frente a la UCR y el FREPASO unidos en una coalición política, la Alianza por el Trabajo, la Justicia y la Educación (Alianza). La Corte Suprema confirmó que Menem no pudo postularse a una tercera reelección. Duhalde se convirtió en el candidato a las elecciones presidenciales y perdió ante el candidato de la boleta de Alianza, Fernando de la Rúa.

Política exterior

Menem with Bill Clinton in June 1993

Durante la presidencia de Menem, Argentina se alineó con los Estados Unidos y tuvo relaciones especiales con el país. Menem mantuvo buenas relaciones con el presidente estadounidense George H. W. Bush y su sucesor Bill Clinton a partir de 1993.

El país abandonó el Movimiento de Países No Alineados y se suspendió el programa de misiles Cóndor. Argentina apoyó todas las posiciones internacionales de los EE. UU. y envió fuerzas a la Guerra del Golfo y los esfuerzos de mantenimiento de la paz después de la Guerra de Kosovo.

El país fue aceptado como un importante aliado fuera de la OTAN, pero no como miembro de pleno derecho.

El gobierno de Menem restableció las relaciones con el Reino Unido, suspendidas desde la Guerra de las Malvinas, luego de que Margaret Thatcher dejara el cargo en 1990. Las discusiones sobre la disputa por la soberanía de las Islas Malvinas tuvieron temporalmente una menor prioridad y el foco pasó a las discusiones sobre los derechos de pesca.

En 1991 Menem se convirtió en el primer jefe de Estado de Argentina en realizar una visita diplomática a Israel. Propuso mediar entre Israel y Siria en sus negociaciones sobre los Altos del Golán. Las relaciones diplomáticas entre Argentina e Israel se vieron luego dañadas por la falta de resultados en las investigaciones sobre los atentados terroristas contra la embajada de Israel y la sede de la AMIA en Buenos Aires.

En 1998, Menem visitó Rusia y se reunió con el presidente ruso Boris Yeltsin, donde Menem expresó sus sentimientos anticomunistas y felicitó a Yeltsin por "derrotar al comunismo" En Rusia.

Chile

Menem y Patricio Aylwin en abril de 1993

Menem también resolvió todos los asuntos fronterizos restantes con Chile. La disputa del Lago del Desierto tuvo un arbitraje internacional, favorable a Argentina. La única excepción fue la disputa por el Campo de Hielo Patagónico Sur, que sigue abierto.

Anteriormente ya diferencia de otras autoridades peronistas, Menem votó por el Tratado de Paz y Amistad de 1984 entre Chile y Argentina. El presidente chileno, Patricio Aylwin, se mostró en un principio escéptico con su homólogo argentino a quien, según Emol, consideró 'desaliñado'. (Español: destartalado). Con el tiempo, sin embargo, Aylwin cambió de opinión y dijo en un momento dado que "este turco se gana a todos". (este turco se los conquista a todos). El sucesor de Aylwin, Eduardo Frei Ruiz-Tagle, tuvo relaciones particularmente cálidas con Menem. El excanciller chileno José Miguel Insulza recuerda las reuniones con Menem y Eduardo Frei Ruiz-Tagle en Anillaco en la década de 1990 donde disfrutaban hablando de política y fútbol. Todo esto hizo que los críticos de Menem lo etiquetaran como 'pro chileno'. El presidente de Chile, Sebastián Piñera, lo llamó póstumamente "un buen amigo de Chile". De igual forma, José Miguel Insulza llamó a Menem "uno de los mejores amigos de Chile".

Fuerzas Armadas

Menem se reunió con el Secretario de Defensa estadounidense William Cohen en la Casa Rosada el 15 de noviembre de 1999.

Argentina aún estaba dividida por las secuelas de la Guerra Sucia (la guerra sucia terminó en 1983, la presidencia de Menem comenzó en 1989). Menem propuso una agenda de reconciliación nacional. Primero, dispuso la repatriación del cuerpo de Juan Manuel de Rosas, un controvertido gobernador del siglo XIX, y propuso conciliar su legado con el de Bartolomé Mitre y Domingo Faustino Sarmiento, quienes también combatieron en las Guerras Civiles Argentinas. Menem pretendía utilizar la reconciliación de estos personajes históricos argentinos como metáfora de la reconciliación de la Guerra Sucia. Sin embargo, si bien la repatriación y aceptación de Rosas fue un éxito, la aceptación del régimen militar no lo fue.

Los líderes militares del Proceso de Reorganización Nacional, condenados en el Juicio de las Juntas de 1985, recibieron indultos presidenciales, a pesar de la oposición popular a ellos. Este era un antiguo pedido de las Carapintadas en años anteriores. Sin embargo, Menem no aplicó los cambios propuestos a las fuerzas armadas. El coronel Mohamed Alí Seineldín, quien también fue indultado, inició un nuevo motín, matando a dos militares. A diferencia de los motines ocurridos durante la presidencia de Alfonsín, los militares acataron a cabalidad las órdenes de Menem de represión contundente. Seineldín fue derrotado por completo y condenado a cadena perpetua. Este fue el último motín militar en Argentina.

El presidente efectuó recortes drásticos en el presupuesto militar y privatizó las fábricas militares. Menem designó al Teniente General Martín Balza, quien había tenido un buen desempeño durante la represión del motín de Seineldín, como Jefe del Estado Mayor General del Ejército (jefe de la jerarquía militar). La muerte de un soldado conscripto en 1994, víctima de abusos por parte de sus superiores, llevó a la abolición del servicio militar obligatorio en el país. Al año siguiente, Balza expresó la primera autocrítica institucional de las fuerzas armadas durante la Guerra Sucia, diciendo que la obediencia no justificaba las acciones cometidas en esos años.

Ataques terroristas

Demostración durante un aniversario del bombardeo de AMIA.

La embajada de Israel sufrió un atentado terrorista con coche bomba el 17 de marzo de 1992. Se percibió como consecuencia de la participación de Argentina en la Guerra del Golfo. Aunque Hezbollah se atribuyó la responsabilidad, la Corte Suprema investigó varias otras hipótesis. El Tribunal redactó un informe en 1996 sugiriendo que podría haber sido la explosión de un alijo de armas almacenado en el sótano. Otra hipótesis fue que el ataque podría haber sido realizado por extremistas judíos, con el fin de culpar a los musulmanes y frustrar las negociaciones de paz. La Corte finalmente responsabilizó a Hezbolá por el ataque de mayo de 1999.

La Asociación Mutual Israelita Argentina sufrió un atentado terrorista con otro coche bomba el 18 de julio de 1994, en el que murieron ochenta y cinco personas. Fue el ataque terrorista más destructivo en la historia de América Latina. El atentado fue condenado universalmente y 155.000 personas se manifestaron en la plaza del Congreso, pero Menem no asistió. El caso legal quedó sin resolver durante el resto de la presidencia de Menem. Menem había sugerido, en la primera conferencia de prensa, que los exlíderes de la Carapintada podrían ser los responsables del atentado, pero esa idea fue rechazada por el ministro de Defensa varias horas después. La oficina de la CIA en Buenos Aires lo consideró inicialmente un ataque conjunto iraní-sirio, pero unos días después lo consideró solo un ataque iraní. Menem y Mossad también prefirieron esta línea de investigación. Como resultado del ataque, la comunidad judía de Argentina había aumentado su influencia sobre la política argentina. Años más tarde, el fiscal Alberto Nisman acusó a Menem de encubrir una conexión local con el ataque, ya que los terroristas locales podrían haber sido parientes sirios lejanos de la familia Menem. Sin embargo, Menem nunca fue juzgado por este presunto encubrimiento, y el 18 de enero de 2015, Nisman fue encontrado muerto de un disparo en la cabeza en su casa de Buenos Aires.

El 15 de marzo de 1995, el hijo de Menem, Carlos Menem Jr. [es] murió mientras pilotaba un helicóptero Bell 206B-3, junto con Silvio Oltra que viajaba como pasajero. Según los informes, el helicóptero golpeó las líneas eléctricas aéreas cerca de Ramallo, en el norte de la provincia de Buenos Aires, y se estrelló, matando a ambos hombres. Posteriormente, los restos de Menem Jr. fueron exhumados en medio de denuncias de asesinato por parte de su madre Zulema Yoma. Menem había acusado al grupo islamista chiíta libanés, Hezbolá, de matar a su hijo.

Post-presidencia

Menem con el nuevo presidente, Fernando de la Rúa, el 10 de diciembre de 1999.

Menem se postuló en 2003 y obtuvo el mayor número de votos, 24%, en la primera vuelta de las elecciones presidenciales del 27 de abril de 2003; pero los votos se dividieron entre numerosos partidos. Según la enmienda de 1994, un candidato presidencial puede ganar de forma absoluta con el 45 % de los votos, o el 40 % si el margen de victoria es de 10 o más puntos porcentuales. Esto sentó las bases para la primera votación de Argentina entre Menem y el segundo clasificado, y su compatriota peronista, Néstor Kirchner, que había recibido el 22 %. Estaba previsto para el 18 de mayo. Sin embargo, en ese momento, Menem se había vuelto muy impopular. Las encuestas pronosticaban que enfrentaría una derrota casi segura ante Kirchner en la segunda vuelta. La mayoría de las encuestas mostraron que Kirchner obtuvo al menos el 60 por ciento de los votos, y al menos una encuesta mostró que Menem perdió hasta por 50 puntos. Para evitar una derrota humillante, Menem retiró su candidatura el 14 de mayo, entregando efectivamente la presidencia a Kirchner.

Menem y Jacques Chirac en Alvear Palace Hotel (1997).

Ángel Maza, el gobernador electo de La Rioja, era aliado de Menem y había hecho campaña a su favor. Sin embargo, las débiles finanzas provinciales obligaron a Maza a cambiar su apoyo a Kirchner, lo que debilitó aún más la influencia de Menem. En junio de 2004 Menem anunció que había fundado una nueva facción dentro del Partido Justicialista, llamada 'Peronismo Popular'. Anunció su intención de presentarse a las elecciones de 2007. En 2005, la prensa informó que estaba tratando de formar una alianza con su exministro de economía Cavallo para pelear en las elecciones parlamentarias. Menem dijo que solo hubo conversaciones preliminares y no resultó una alianza. En las elecciones del 23 de octubre de 2005, Menem ganó el escaño minoritario en el Senado en representación de su provincia natal. Los dos escaños asignados a la mayoría los ganó la facción del presidente Kirchner, encabezada localmente por Ángel Maza.

Menem se postuló para gobernador de La Rioja en agosto de 2007, pero fue derrotado. Terminó en tercer lugar con alrededor del 22% de los votos. Esto fue visto como una derrota catastrófica, que marca el final de su dominio político en La Rioja. Era la primera vez en 30 años que Menem perdía una elección. Tras esta derrota en su provincia natal, retiró su candidatura a la presidencia. A fines de 2009 anunció que tenía la intención de postularse nuevamente para la presidencia en las elecciones de 2011. pero se postuló para un nuevo mandato como senador. En 2019, finalmente se sentó en el Frente de Todos' Senado hasta su muerte en 2021.

Cargos de corrupción

El 7 de junio de 2001, Menem fue arrestado por un escándalo de exportación de armas. El esquema se basó en las exportaciones a Ecuador y Croacia en 1991 y 1996. Estuvo bajo arresto domiciliario hasta noviembre. Compareció ante un juez a fines de agosto de 2002 y negó todos los cargos. Menem y su segunda esposa chilena, Cecilia Bolocco, quien había tenido un hijo desde que se casaron en 2001, huyeron a Chile. Autoridades judiciales argentinas solicitaron reiteradamente la extradición de Menem para enfrentar cargos de peculado. Esta solicitud fue rechazada por la Corte Suprema de Chile ya que, según la ley chilena, las personas no pueden ser extraditadas para ser interrogadas. El 22 de diciembre de 2004, luego de que se cancelaran las órdenes de captura, Menem regresó con su familia a Argentina. Todavía enfrentaba cargos de malversación de fondos y no declarar fondos ilegales en un banco suizo. Fue declarado inocente de esos cargos en 2013.

En agosto de 2008, la BBC informó que Menem estaba siendo investigado por su papel en la explosión de Río Tercero en 1995, que presuntamente fue parte del escándalo de armas que involucra a Croacia y Ecuador. Luego de un fallo de la Corte de Apelaciones que encontró a Menem culpable de contrabando agravado, fue sentenciado a siete años de prisión el 13 de junio de 2013 por su papel en el contrabando ilegal de armas a Ecuador y Croacia; su cargo de senador le valió inmunidad carcelaria, y su avanzada edad (82) le brindó la posibilidad de arresto domiciliario. Su ministro de Defensa durante la venta de armas, Oscar Camilión, fue condenado simultáneamente a cinco años y medio. Menem tenía previsto asistir a un juicio sobre el asunto en el que se le acusa de 'responsabilidad indirecta', el 24 de febrero de 2021; pero murió diez días antes de eso.

En diciembre de 2008, la multinacional alemana Siemens acordó pagar una multa de 800 millones de dólares al gobierno de los Estados Unidos y aproximadamente 700 millones de euros al gobierno alemán para resolver las denuncias de soborno. El acuerdo reveló que Menem había recibido alrededor de US$2 millones en sobornos de Siemens a cambio de otorgar el contrato de producción de pasaportes y cédulas de identidad nacional a Siemens; Menem negó los cargos pero, no obstante, accedió a pagar una multa.

El 1 de diciembre de 2015, Menem también fue declarado culpable de peculado y condenado a cuatro años y medio de prisión. Domingo Cavallo, su ministro de Economía, y Raúl Granillo Ocampo, exministro de Justicia de Menem, también recibieron sentencias de prisión de más de tres años por participar en el esquema, y se les ordenó reembolsar cientos de miles de pesos de bonificaciones ilegales.

Enfermedad y muerte

Menem miente en estado

El 13 de junio de 2020, Menem fue hospitalizado debido a un caso grave de neumonía y colocado en cuidados intensivos; dio negativo en la prueba de COVID-19 y fue dado de alta el 29 de junio de 2020, tres días antes de cumplir 90 años. El 15 de diciembre de 2020 fue hospitalizado nuevamente en el Sanatorio Los Arcos por una infección urinaria. El 24 de diciembre de 2020, Menem fue inducido al coma tras una insuficiencia renal.

Murió el 14 de febrero de 2021 en el Sanatorio Los Arcos de Buenos Aires por complicaciones de una infección urinaria. El gobierno nacional emitió tres días de luto nacional y realizó un funeral público en el Palacio del Congreso Nacional Argentino. Asistieron varios políticos, incluido el presidente Alberto Fernández, y cientos de personas. Fue enterrado en el cementerio islámico de San Justo al día siguiente, junto a su hijo. Su hija confirmó que había muerto como católico, pero sería enterrado según los ritos musulmanes en el Cementerio Islámico para estar con su familia.

Aunque los expresidentes deben tener un busto en el Salón de Bustos de la Casa Rosada 8 años después de que dejen el cargo, al momento de su muerte Menem nunca recibió tal honor. Casa Rosada en realidad tiene un busto de Menem donado por el artista Fernando Pugliese, pero nunca lo divulgó. El presidente Alberto Fernández le dijo a Zulema Menem que la intención era hacer una ceremonia una vez que Menem se recuperara de sus problemas de salud; desafortunadamente, murió.

Estilo y legado

En sus inicios, Menem lucía una imagen similar a la de los antiguos caudillos, como Facundo Quiroga y Chacho Peñaloza. Se arregló las patillas con un estilo similar. A su toma de posesión presidencial asistieron varios gauchos.

Contrario a la tradición peronista, Menem no preparó grandes mítines en la Plaza de Mayo para dirigirse al pueblo desde el balcón de la Casa Rosada. En cambio, aprovechó al máximo los medios de comunicación de masas, como la televisión.

La administración de Menem fue encumbrada por los libertarios Javier Milei y Diego Giacomini a fines de la década de 2010, luego de ser fuertemente criticada durante y por el kirchnerismo. Algunos economistas liberales como José Luis Espert y Alberto Benegas Lynch también han tenido un enfoque crítico hacia la presidencia de Menem.

Su legado duradero fue un registro tan notorio como para apagar el debate racional sobre la política económica en América Latina para una generación. Él y su Argentina fueron indelebles como esclavos “neoliberales” del “consenso de Washington”. Por extensión, el liberalismo y una economía capitalista fueron condenados.

El economista, 20 de febrero de 2021

Honores

Honores extranjeros

  • Croacia:
    • Ribbon of an order of king Tomislav Gran Cruz de la Gran Orden del Rey Tomislav
  • Egipto:
    • EGY Order of the Nile - Grand Cordon BAR.png Collar de la Orden del Nilo
  • Jamaica:
    • Order of Jamaica Primera Clase de la Orden de Jamaica
  • Lituania:
    • LTU Order of Vytautas the Great - Grand Cross BAR.png Gran Cruz de la Orden de Vytautas la Grande
  • Italia:
    • Cordone di gran Croce di Gran Cordone OMRI BAR.svg Knight Grand Cross con Orden de Mérito de la República Italiana (1992)
  • Malasia:
    • MY Darjah Utama Seri Mahkota Negara (Crown of the Realm) - DMN.svg Recipiente honorario de la Orden de la Corona del Reino (1991).
  • Panamá:
    • PAN Order of Manuel Amador Guerrero - Grand Cross BAR Collar de la Orden de Manuel Amador Guerrero
  • Perú:
    • PER Order of the Sun of Peru - Grand Cross BAR Collar de la Orden del Sol del Perú
  • Polonia:
    • POL Order Zaslugi RP kl1 BAR Gran Cruz de la Orden del Mérito de la República de Polonia
  • España:
    • Order of Isabella the Catholic - Sash of Collar.svg Collar de la Orden de Isabella la Católica
  • Sudáfrica:
    • Ord.GoodHope-ribbon.gif Gran Cruz de la Orden de Buena Esperanza
  • Túnez:
    • Order of the Republic (Tunisia) - ribbon bar.gif Grand Cordon of the Order of the Republic of Tunisia (1997)
  • Uruguay:
    • Medal of the Oriental Republic of Uruguay - ribbon bar.gif Medalla de la República Oriental del Uruguay (1994).
  • Reino Unido:
    • UK Order St-Michael St-George ribbon.svg Honorario Caballero Gran Cruz de la Orden de San Miguel y San Jorge (1998).

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