Canal sifonal

format_list_bulleted Contenido keyboard_arrow_down
ImprimirCitar
Un proyectil de Penion cuvieranus cuvieranus, con el largo canal sifónico visible que se extiende hacia la parte inferior de la imagen, en el extremo anterior de la cáscara.
El canal sifonal es una característica anatómica de las conchas de ciertos grupos de caracoles marinos del clado Neogastropoda. Algunos gasterópodos marinos presentan una extensión anterior tubular blanda del manto, llamada sifón, a través de la cual el agua se introduce en la cavidad del manto y pasa por las branquias, y que actúa como quimiorreceptor para localizar el alimento. Los canales sifonales permiten el transporte activo de agua a los órganos sensoriales del interior de la concha. Los organismos sin canales sifonales en sus conchas dependen del transporte pasivo o difuso de agua al interior de la concha. Aquellos con canales sifonales tienen una corriente de agua inhalada directa que interactúa con los órganos sensoriales para detectar la concentración y la dirección de un estímulo, como alimento o pareja. En ciertos grupos de caracoles carnívoros, donde el sifón es particularmente largo, la estructura de la concha se ha modificado para albergar y proteger la estructura blanda del sifón. Así, el canal sifonal es una extensión semitubular de la abertura de la concha a través de la cual se extiende el sifón cuando el animal está activo.

Morfología

El tamaño y la forma del canal sifonal son importantes para la identificación taxonómica de los moluscos. Los canales sifonales sellados son una característica morfológica de las subfamilias Ocenebrinae y Typhinae de Muricidae, una característica que no se encuentra en otras subfamilias de este grupo taxonómico. Un gasterópodo cuya concha presenta un canal sifonal excepcionalmente largo es el múrice peine de Venus. Algunos gasterópodos presentan una muesca sifonal simplificada en el borde de la abertura en lugar de un canal. Por ejemplo, los gasterópodos de zonas intermareales altas suelen tener un canal sifonal muy corto o una muesca sifonal muy reducida.Existen estrechos paralelismos entre la forma de la concha y la presencia de un canal sifonal. Un estudio realizado por Vermeij reveló que las conchas con un ángulo pronunciado en su curva generatriz respecto a su eje base (E) no presentan canales sifonales. En concreto, todas las conchas examinadas con un ángulo E superior al 30 % no presentaban canales sifonales, pero las conchas con ángulos menores sí los presentaban con frecuencia.Algunas especies de bivalvos comensales obligados prefieren un canal sifonal corto. Curvemysella paula está especialmente adaptada para vivir dentro de las conchas de caracoles ocupadas por cangrejos ermitaños. La concha en forma de medialuna de C. paula facilita la entrada al estrecho espacio interior de las conchas, donde se unen a las columelas y al canal sifonal mediante hilos bisales. La posición y ubicación de la unión anterior, cerca de los verticilos finales de la concha, es un comportamiento evolutivo de los individuos adultos que impide su extracción por parte del hospedador.

Evolución

Las indentaciones sifonales han evolucionado múltiples veces en los gasterópodos y están ampliamente distribuidas en muchos clados. Los gasterópodos Euomphanilae del género Scalites desarrollaron sifones a principios del Ordovícico (hace 448-443 millones de años); sin embargo, no se observan en ningún otro miembro del clado. Se estima que 22 de los 23 casos de indentaciones sifonales evolucionaron en los gasterópodos Murchosinoniinae. Los dos clados principales de este grupo son Vetigastropoda (un grupo de sifonados: Tylozone) y Apogastropoda. Apodastropoda incluye Caenogastropoda (14 casos de evolución de sifones) y Heterobranchia (3 casos de evolución de sifones).La evolución de las hendiduras sifonales y partes relacionadas no está asociada con la diversificación de especies y, por lo tanto, probablemente no constituyan innovaciones clave. La diversificación se observa solo en el 17% de los clados sifonados y ocurrió principalmente durante el Ordovícico, el Paleozoico tardío y el Mesozoico, restringiéndose a clados con pocos géneros. La depredación activa solo ocurre en un clado sifonado (~4,5%) y no se considera un factor determinante de la evolución. Además, la evolución del canal sifonal no coincidió con un cambio en el estilo de alimentación, ya que el ancestro basal no era depredador. Una hipótesis es que la evolución del canal sifonal se debió a la locomoción, ya que las especies sin canales sifonales son mayoritariamente sedentarias, mientras que las familias sifonales pueden desplazarse por el bentos. Sin embargo, debido a los amplios contextos ecológicos de los gasterópodos con canal sifonal, no existe una hipótesis de consenso ni un factor determinante unificado que pueda explicar la evolución o la pérdida de esta estructura.El canal sifonal surgió de forma independiente en el registro fósil 23 veces y posteriormente se perdió 17 veces. Esta pérdida secundaria se asoció con la miniaturización, la adopción de un estilo de vida sésil y hábitos no marinos. Un posible factor de estas pérdidas podría haber sido que las especies ya no dependían de la quimiorrecepción a distancia, común en los gasterópodos no marinos. Durante los períodos Cretácico y Cenozoico, algunas especies desarrollaron canales sifonales largos o cerrados. Este fue el primer ejemplo de evolución de canales largos y cerrados, que posteriormente surgió aproximadamente 15 veces. Los canales cerrados, en particular, ayudaron a prevenir la depredación al blindar al gasterópodo. De forma más general, el canal sifonal protege a los gasterópodos al permitir que sus conchas estén completamente cerradas, con su manto protegido, a la vez que perciben las señales del entorno.

Véase también

  • siphonal notch
  • Noche estrombótica

Referencias

  1. ^ a b c Vermeij, G. J. (1971). "Evolución gastropod y diversidad morfológica en relación con la geometría de los proyectiles". Journal of Zoology. 163 1): 15–23. doi:10.1111/j.1469-7998.1971.tb04522.x.
  2. ^ a b c Dekkers, Aart M (2021). "Sobre anormalidades en el número de ojos y la evolución de los posibles aspectos relacionados con la vista ocular en Strombidae; introduciendo nuevos términos de shell en morfología Strombidae (Gastropoda: Stromboidea, Strombidae)" (PDF). El Festivus. 53 3): 163–181. doi:10.54173/F533163. S2CID 240622464.
  3. ^ Vermeij, G. J.; Vokes, E. H. (1997). "Cenozoic Muricidae de la región del Atlántico occidental. Parte XII-La subfamilia Ocenebrinae (en parte)". Tulane Studies in Geology and Paleontology. 29 3): 69 –118 – via Archive.org.
  4. ^ Lindberg, David R.; Ponder, Winston F. (2001-01-01). "La influencia de la clasificación en la interpretación evolutiva de la estructura una reevaluación de la evolución de la cavidad pallial de moluscos gastropodistas". Organisms Diversidad " Evolution. 1 4): 273 –299. Bibcode:2001ODivE...1..273L. doi:10.1078/1439-6092-00025. ISSN 1439-6092.
  5. ^ Goto, Ryutaro; Hamamura, Yoichi; Kato, Makoto (2007-06-01). "Obligate commensalism of Curvemysella paula (Bivalvia: Galeommatidae) with hermit crabs". Marine Biology. 151 5): 1615–1622. Bibcode:2007MarBi.151.1615G. doi:10.1007/s00227-006-0518-7. ISSN 1432-1793. S2CID 84635084.
  6. ^ a b c d e f h i j Vermeij, Geerat J. (2007). "La ecología de la invasión: adquisición y pérdida del canal sifónico en gastropods". Paleobiología. 33 3): 469 –493. Bibcode:2007Pbio...33..469V. doi:10.1666/06061.1. ISSN 0094-8373. S2CID 85321213.

Más lectura

  • Vermeij, G. J. (2007). "La ecología de la invasión: adquisición y pérdida del canal sifónico en gastropods". Paleobiología 33(3): 469-493. doi:10.1666/06061.
Más resultados...
Tamaño del texto:
undoredo
format_boldformat_italicformat_underlinedstrikethrough_ssuperscriptsubscriptlink
save