La Lógica Clásica Aristotélica (y Leibniziana)
Los principios de la lógica clásica, son cuatro planteamientos teóricos, atribuídos al desarrollo del pensamiento aristotélico, y que sirven para... (leer más)
La navaja de Ockham es un principio heurístico según el cual la proposición más sencilla, de un conjunto que se halla en igualdad de condiciones, suele ser la correcta.
Su autoría se atribuye al fraile franciscano Guillermo de Ockham, aunque el formuló una expresión lógica más sencilla, que la interpretación posterior terminaría definiendo como actualmente se conoce.
Este principio, que ha sido ampliamente abordado en áreas como las ciencias económicas, expone que la simplicidad de las relaciones es una muestra evidente de utilidad, y no al revés.
Al definir el concepto de Navaja de Ockham, debe comprenderse el contexto en el que se crea la expresión, así, durante los siglos XI al XIII, se desarrolló en Europa un movimiento académico denominado escolástica, en el marco del debate medieval sobre el orden divino.
Así, la Navaja de Ockham es una metáfora, con las que estos teólogos escolásticos, se refirieron a toda regla lógica, que invalidaba todo aquello que superara lo necesario ─necessitatem─.
Aquello que supera lo suficiente, se corta con la navaja de Ockham
Parece ser que el concepto, surge como una referencia informal al primer autor en abordar esta lógica sistémica, muy bien recibida por la escolástica, que prueba lo innecesario ─superfluum─ de divagar en aquello que ya tiene una explicación bien formulada, o suficiente.
Así, autores posteriores como Pedro Lombardo, o Tomás de Aquino, basaron gran parte de su filosofía escolástica en lo innecesario de lo de toda manifestación excesiva ─plura─ de un mundo que debía tender a la unidad, obviamente representada en Dios.
Y Leibniz retoma este concepto, desprendido de su connotación teológica, con su principio de razón suficiente, incrustando aún más el término Navaja de Ockham en el debate lógico de los siglos posteriores, XVII-XVIII.
El término, que describe un concepto previo a Ockham, se asocia a él por el desarrollo filosófico que tuvo en su obra, especialmente durante la época de la filosofía escolástica. En la obra Libri Quattuor Sententiarum, ya se cita:
Frustra fit per plura quod potest fieri per pauciora [...]
(Es infructuoso hacer con más aquello que se puede hacer con menos)
Guillermo de Ockham[1]
(Traducción del autor*)
De ahí que se convirtiera en el autor por antonomasi de aquel principio.
Con certeza sabemos que en la lengua inglesa la expresión es acuñada por John Stuart Mill, quien la citó para compara las expresiones de la obra de William Hamilton, con la siguiente expresión:
The real ground of the prohibition is what our author terms the Law of Parcimony ; a principle identical with the famous maxim of the Nominalists, known as Occam's Razor [...]
(El verdadero fundamento de la prohibición es lo que nuestro autor denomina la ley de la parsimonia; un principio idéntico a la famosa máxima de los nominalistas, conocida como la navaja de Ockham)
An Examination of William Hamilton’s Philosophy[2]
(Traducción del autor*)
[1]: Fray Guillermo de Ockham | Libri Quattuor Sententiarum.
[2]: John Stuart Mill | An Examination of William Hamilton’s Philosophy: Pág. 465.
Tomás de Aquino es quizá el mayor difusor del concepto, muy repetido en toda su obra, y atribuido dentro de la filosofía escolástica, a Ockham.
Es decir, Ockham no crea los principios de parsimonia ─nombre tomado de Aquino─, o de economía ─nombre posterior y más secular─, sino que crea su fundamento lógico en el marco de los escolásticos, y ha de ser tan bien sustentada su fundamentación, que ha trascendido a nuestros días.
Así por ejemplo podemos tomar algunas citas textuales de la obra de Aquino para explicar mejor esto:
Quod enim potest per unum fieri in natura, non fit per plura.
(Lo que la naturaleza no posibilita para ser hecho de una forma, no se podrá de varias)
Quaestio disputata de anima[3]
(Traducción del autor*)
Praeterea, quod potest compleri per pauciora principia, non fit per plura.
(Más aún, lo que puede completarse por un principio suficiente, no se puede por otros)
Summa Theologiae[4]
(Traducción del autor*)
Quod potest fieri per pauciora, superfluum est si fiat per plura.
(Lo que puede hacerse con poco, es redundante si se hace con mucho)
Commentaria in octo libros Physicorum[5]
(Traducción del autor*)
[3]: Tomás de Aquino | Quaestio disputata de anima: Art. 4, Arg. 1.
[4]: Tomás de Aquino | Summa Theologiae: Vol. 1, Tít. 2, Art. 3, Arg. 2.
[5]: Tomás de Aquino | Commentaria in octo libros Physicorum: Lib. 1, Lec. 11, Num. 14.
Como muchas obras antiguas, y especialmente las de este periodo ─el medioevo─, es frecuente que sus autores, y sus citas, estén rodeadas de incertidumbre, y muchas veces de adjudicaciones erradas.
Entia non sunt multiplicanda, praeter necessitatem
(Las cosas no se multiplican, más que lo necesario)
John Ponce de Cork[6]
(Traducción del autor*)
Por ejemplo, sobre la navaja de Ockham se ha hecho constante alusión a algunas citas de John Ponce de Cork, que parecen haber sido la proposición del propio autor, y no necesariamente una referencia a la obra de Ockham.
Lo cierto es que Ponce no dista mucho del concepto que se atribuye a la Navaja de Ockham, y puede ser, o bien una lectura ligera que hizo de los textos originales, o bien una traducción mal hecha, frecuentes en el siglo XIX.
John Ponce, es quien lo introduce a la literatura inglesa, a través de sus comentarios de la obra de Okcham.[¶]
[6]: Luke Wadding | Comentarios al Opus Oxoniense.
El principio planteado por Fray Ockham es uno de los fundamentos teóricos de la posterior evolución científica europea, que buscó simplificar y sistematizar las objetos cognoscibles por el ser humano.
Representa el análisis teórico de un principio de economía real, 'la utilidad', tendiendo aquello que es útil a permanecer, por cuanto es sustancioso, y en contraste aquello que es inútil tiende a desaparecer, por cuanto no es sustancioso.
Luego lo redundante tiende simplificarse, en virtud de que no se mantendrá por mucho lo que es naturalmente inútil.
Así, si se tienen un conjunto de planteamientos, todos con el mismo valor proposicional como referencia, aquel que sea más sencillo, probablemente sea el mejor decantado y por tanto el más sustancioso, o al menos el que mejor resista la falseabilidad.
principio de unificación en el pensamiento tomista
AcademiaLab© Actualizado 2024
This post is an official translation from the original work made by the author, we hope you liked it. If you have any question in which we can help you, or a subject that you want we research over and post it on our website, please write to us and we will respond as soon as possible.
When you are using this content for your articles, essays and bibliographies, remember to cite it as follows:
Anavitarte, E. J. (2013, July). La Navaja de Ockham. Academia Lab. https://academia-lab.com/2013/07/03/la-navaja-de-ockham/
Los principios de la lógica clásica, son cuatro planteamientos teóricos, atribuídos al desarrollo del pensamiento aristotélico, y que sirven para... (leer más)
La falacia es una proposición argumentativa que es lógicamente falsa pero se presenta como lógicamente... (leer más)
Los sesgos cognitivos son un fenómeno psicológico involuntario que distorsiona el procesamiento de la información al intentar analizar la realidad... (leer más)